La Reina Roja de Tokyo Tokyo Revengers × o/c)

Capítulo 1

"No nos conocimos por mucho tiempo.. pero cada momento que compartimos, vale para mí más que nada.. y agradezco que aún ahora haya podido verte..."

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—¡Yuki!— se escuchó gritar a una chica quien le había puesto ese "apodo" recortando su nombre.

—¿Eh? ¡Ah! Emma espera ¡bájate!— mencionaba la chica de cabellos rubios con mechones azulados mientras intentaba mantener el equilibrio luego de que cierta chica rubia de ojos verdes hubiese saltado para darle un abrazo. —Emma si sigues haciendo eso nos vamos a lastimar en serio un día de estos.—

—Lo siento, no pude resistirme, tenía siglos sin verte, sabes que Mikey no me deja venir mucho a las reuniones— respondió la contraria con una leve expresión de puchero.

—Lo entiendo, pero sabes que podríamos caernos.

—¡Claro que no! Te conozco y sé que no dejarías que eso pasara.

—Bueno tienes razón, pero igual no olvides que podría fallar algo y...

—¡Oye Emma!— se escuchó un grito a lo lejos que alertó a ambas chicas, de las cuales la recién nombrada reaccionó de inmediato y caminó en dirección a aquel chico de cabellos rubios y tatuaje en la sien.

Fuyuki por su parte se había quedado sola un momento, así que simplemente esperaba sentada en una banca al regreso de su amiga, al menos hasta que vió una escena que la dejo un tanto.. "confundida", pues una chica de cabello castaño había golpeado bastante fuerte y en repetidas ocasiones a un chico que no recordaba haber visto antes, poco después la chica se retiraba del lugar dejando solo al recién golpeado desconocido.

No pasó mucho tiempo después de ello para que Emma regresara hasta ella, lo que les dió un tiempo para hablar y ponerse al día con sus vidas, esto debido a que a pesar de tener la misma edad, ambas asistían a escuelas diferentes.

Pasados algunos minutos el teléfono de la de ojos morados comenzó a sonar, cuando miro la pantalla se sorprendió un poco y de inmediato se puso en pie.

—Emma.. ¿me disculpas un momento? Esta llamada es.. muy importante.

—Claro, tranquila, iré a ver si ya terminaron la reunión y te veo enseguida.— respondió la rubia de ojos verdes antes de levantarse y hacer con la mano una seña de "adiós" mientras se alejaba en dirección a las escaleras del templo.

Fuyuki por su parte con las manos un poco temblorosas respondió la llamada.

—¿Ho.. hola?

—¿Cómo estás Yuki? Acabamos de llegar a casa y no te vimos, al menos debiste avisarnos que no estarías.

—Lo siento hermano.. no creí que llegarían hoy, así que decidí salir con una amiga y...

—¿Amiga? ¿Segura que no estás con algún chico? Porque sabes que no tienes..

—¡No! Oye, ya hemos hablado de esto, es una amiga, además si ya están en casa iré para allá ahora ¿bien?

—Mejor dime dónde estás, vamos por tí ahora.

—¿Eh? Ah sí.. estoy en.. estoy en la estación, vamos saliendo de comprar algo de ropa para ella, de verdad no tienen que venir.— no era muy notorio, pero la voz de Fuyuki estaba temblando levemente, no era el hecho de tenerle miedo a sus hermanos, más bien era la idea de saber su.. "fama" de siempre estar cuidandola y celar todas las relaciones que llegase a tener con mujeres, además claro que ya habían tenido unas cuantas peleas por relacionarse aún en lo más mínimo con hombres.