Capítulo 23.

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Tengo miedo del capítulo de hoy. Va a estar emocionante el capítulo del manga, y puede que sea doloroso si el resumen que he leído es cierto. Aun así no hay que perder la fe en nuestro héroe llorón, pero me duele que esté sufriendo tanto y también me duele ver que Mikey se pierde más y más en esa oscuridad. En fin, rezaremos para que todo salga bien y por el momento yo seré positiva y sé que este capítulo será muy buen material para esta historia. 

Bueno, espero que disfruten de mi capítulo. 

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1 de Diciembre 2005.

Mikey estaba más que furiosa con Takemichi y de verdad deseaba buscarlo y darle una buena paliza, pero no podía hacer eso. Deseaba hacerlo, pero no debía. Él ahora era capitán de la ToMan y no quería inmiscuir sus sentimientos en la pandilla, así que estaba decidida a ignorarlo y hacer como si no existiera. Estaba claro que se había equivocado con él.

Iba caminando con paso tranquilo a su casa y mientras se iba acercando se encontró con que Emma estaba en la entrada hablando con Hinata. Mikey apretó los dientes pues de verdad que no soportaba a Hinata. Aun así empezó a ir con paso lento y se escondió para oír de lo que hablaban.

- ¿De verdad vas a arrastrarte? – pregunta Emma un poco confusa -. Hina-chan, no deberías hacer eso.

- Lo dices porque Mikey es tu hermana – dice Tachibana un poco molesta -. Pero pienso recuperar el amor de Takemichi-kun. Y me alegré mucho que aceptase ir a la bolera los dos juntos, pero me dijo que solo somos amigos y me dejó bien claro que no siente nada por mí.

- Y aun así estás dispuesta a rebajarte por un chico – comenta Emma sacudiendo la cabeza -. Sé que yo también me arrastro un poco, pero en el fondo sé que Ken-chan siente algo por mí.

- Takemichi-kun aún me ama – dice Hina -. Lo que pasa es que Mikey lo ha confundido.

- Lo que tú digas – susurra la menor de los Sano con un suspiro -. Deberías irte ya o se te hará tarde para tus clases extra.

Hina miró la hora en su reloj y se sorprendió. Con eso se despide rápidamente de Emma y se marcha corriendo.

Mikey por el contrario seguía escondida y en su cara había una gran sonrisa. Tal parecía que Takemichi no había tenido una cita con Hina, y que al final aceptó ir a la bolera por la insistencia de Tachibana. Esa chica iba a ser un dolor en su trasero, y estaba claro que iba en su contra pero no iba a conseguir lo que se proponía. ¿Hinata quería pelear por Takemichi? Esa guerra ya estaba ganada, así que no tenía de qué preocuparse. Con eso sale de su escondite de lo más feliz y entra a su casa. Se deshace rápidamente del uniforme escolar y va con Emma para ayudarla con algunas tareas. Ahora estaba de mucho mejor humor y su hermana se percata, pero decide no preguntar.

Takemichi se había ido a su casa después de que Draken apareciera como un perro rabioso y se marchase como si nada hubiera pasado. Ahí Takemichi comenzó a pensar en Mikey. El rubio de la trenza le había dicho que estaba enfadada con él, y eso le daba miedo. ¿Por qué Mikey se enfadaría con él? ¿Tal vez ella sentía algo por él?

Fue ahí cuando le llegan a la mente todos los besos que se había dado con Mikey. El primero fue el 1 de agosto, cuando ella y Draken se reconciliaron, después de eso Takemichi la besó en la azotea del hospital el 10 de agosto y el beso que Mikey le dio el 22 de octubre después de la reunión donde nombraron a Kisaki capitán.

Ahora el teñido se encontraba tumbado en su cama mirando el techo y de repente un recuerdo llega a él. Estaba en el hospital, y Mikey lo miraba muy preocupada. Takemichi supuso que debió ser después de su operación. De repente se levanta de golpe. Había recordado algo más. Mikey le besó esa noche y él le dijo que se veía hermosa cuando sonreía. ¿Qué demonios le estaba pasando? ¿Por qué venían todos eso recuerdos a él?

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