Tokyo Manji

Capítulo 9.

Les prometo que iba a subirlo ayer, pero quise esperar a leer el capítulo del manga, el cual me gustó. Sé que varias personas están funando a Mikey nuevamente, pero eso no me importa. A mi me gusta ese personaje con defectos incluidos. 

También he leído el spin-off de Baji y Chifuyu. También me a gustado mucho, pero me ha hecho llorar, pero como me gusta verle el lado bueno a las cosas, he pensado que el spin-off me va a venir muy bien para la historia. Ya que mi shipp favorito después del Maitake o Takemai es el Bajifuyu. Así que tendré más material de esos dos, y aunque sea doloroso lo soportaré. 

Bueno, con eso dicho les dejo con el capítulo el cual espero que disfruten. 

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Takemichi se fue directamente a su casa y estuvo asimilando lo que había hecho en la azotea del hospital. No creía que pudiera volver a mirar a Mikey a la cara. De verdad que estaba muy avergonzado por lo que había hecho, y por ese mismo motivo es que decide que era hora de volver al presente. No debía meter más la pata, y si permanecía más tiempo ahí es lo que pasaría. Además, también se sentía culpable. Él amaba a Hina. Recordaba muy bien lo que sentía por ella, pues fue maravilloso tenerla como novia. Con eso en mente se dirige a casa de Hina y llevó un presente. No le diría lo que había pasado con Mikey, pues de hacerlo la pelirroja lo molería a golpes, pero como compensación le regalaría un collar. Esa era la forma en la que se disculparía.

- ¿Takemichi-kun? – dice la pelirroja al abrir la puerta -. Siempre apareces sin previo aviso.

- Lo siento – dice el teñido avergonzado. Le costaba mirar a Hina a la cara -. Oye, ¿está Naoto?

- ¡Naoto! – Hina llama a su hermano -. Takemichi-kun te busca – al ver que su hermano no respondía se gira para mirar a su novio -. Ya vuelvo.

- Oh, Hina – se apresura a decir Takemichi y del bolsillo de su pantalón saca un collar -. Toma.

Era un collar simple pero bastante mono. La medalla era un trébol de cuatro hojas. Takemichi lo había visto mientras se dirigía a casa de Hina y al verlo decidió comprarlo para la chica, pensando que sería una buena forma de pedir disculpas por lo que había hecho. Sabía que no había estado bien, pero de igual forma quería compensar a la chica por el error que él había cometido.

- ¿Eh? ¿Un collar? – susurra Hina extendiendo sus manos para recibir el regalo.

- Ya sabes, por haberte metido en todo ese asunto... - susurra Takemichi, pero en verdad le estaba regalando eso por haber besado a Mikey-chan.

- ¿Lo del festival? – pregunta la chica con una sonrisa.

- Intento compensártelo... - susurra él.

- ¿Un trébol de cuatro hojas? – dice ella mirando el collar. Para la pelirroja era precioso, ya que las hojas del trébol parecían corazones color esmeralda -. ¿Puedo ponérmelo? – Takemichi solo asiente mientras mantenía la mirada apartada. Ahora mismo se estaba sintiendo muy culpable -. ¿Cómo me queda? – ahí el teñido la mira. Esta estaba sonriendo de lo más feliz y eso hizo que Hanagaki se sintiera más culpable.

- Sí, te queda bien – responde él con una pequeña sonrisa.

- Gracias, lo cuidaré bien – asegura ella admirando la medalla.

- Oigan... - dice Naoto, el cual estaba esperando bajo el marco de la puerta. Hina mira a su hermano algo avergonzada y Takemichi un poco sorprendido, pero agradeció que el pelinegro llegase -. Siento interrumpir a los tortolos, pero... ¿Me llamaban?