Tokyo Manji

Capítulo 46.

Hola!! Siento haber estado desaparecida por tanto tiempo. Resulta que mi ordenador terminó de morir y tuve que comprarme otro y acostumbrarme a él, ya que el nuevo es un poco más pequeño. También he estado ocupada con el trabajo, mi hija, mi pareja. Y para sorpresa resulta que estoy de nuevo embarazada y he estado con vertigos. Esos han sido los motivos de haber estado ausente. Pero ya estoy mejor y creo poder actualizar la historia por lo menos una vez a la semana. 
Siento haber estado desaparecido y gracias por la comprensión. Bueno, espero que disfruten del capítulo. 

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23 Febrero 2006.

Takemichi entreabre los ojos y nada más hacer eso siente un ligero dolor de cabeza. La luz le estaba cegando, así que tuvo que cerrar los ojos de nuevo. No sabía dónde estaba, pero notaba el cuerpo entumecido. Fue en ese momento que lo sucedido el día de ayer comienza a filtrarse en su cabeza y eso causa que se tense y que abriera los ojos de golpe y ahí se da cuenta que no estaba solo. Junto a él estaba Mikey, la cual se había quedado dormida en una silla y se había recostado en el borde de la cama. Ver a Manjiko hizo que se relajase un poco.

Takemichi cierra de nuevo los ojos y coge una bocanada de aire. Necesitaba relajarse un poco, pero le resultaba difícil. El día de ayer ocurrieron demasiadas cosas, y por raro que pareciera lo que más le afectaba era que Kisaki murió frente a sus ojos. Se sentía culpable, pues después de todo se había equivocado. Kisaki solo había sido utilizado, aunque tal vez hubiera mentido. Ahora mismo Takemichi no sabía que pensar.

Mikey se remueve un poco y es cuando se yergue. No sabía que la había despertado, pero estaba muy cansada ya que no había dormido bien. Al erguirse pone sus ojos en Takemichi, el cual la miraba con una pequeña sonrisa.

- Micchi-kun – dice ella con una pequeña sonrisa.

- ¿Has pasado aquí toda la noche? – pregunta el teñido.

- Sí, no iba a dejarte solo – responde ella.

Se hizo un silencio cómodo en el cual ambos se miraban. El que Mikey estuviera ahí hacía que el teñido se relajase, en cambio Mikey estaba preocupada, pero ocultaba sus sentimientos. Había estado pensando toda la noche y se dijo que debía hablar con Takemichi y saber por todo lo que había pasado. Era hora de que hablasen y que el teñido le contase la verdad. Pero ahora ella debía centrarse en su familia. Había pasado toda la noche con Takemichi, velando por él, pero ahora debía estar junto a su hermana y también ir a hablar con Izana.

- Debo irme – dice Mikey levantándose -. Quiero saber cómo está Emma, y también tengo que ir a hablar con Izana.

- ¿Él está bien? – pregunta Hanagaki.

- Sí – responde ella -. Él y Kakucho están en este hospital y ambos están bien – con eso Mikey se inclina y deja un beso en los labios de Takemichi -. Pero tú ocúpate de recuperarte.

- ¿Tú estás bien? – pregunta Takemichi.

- Claro que sí – miente ella con una pequeña sonrisa -. Me pasaré a verte antes de volver a casa. Descansa – con eso la rubia se acerca a la puerta pero se detiene y se gira para mirar a Takemichi con una sonrisa -. Y ni se te ocurra levantarte de esa cama. Me enteraré si lo haces.

Takemichi ríe por eso y ve como Mikey se marcha. Pensó que se quedaría más tiempo a solas, pero Haruko enseguida entra a la habitación de su hijo para ver cómo se sentía y también para darle una buena charla por el susto que le había dado.

Mientras tanto Haiden estaba en la comisaría en compañía de Makoto. Su amigo hacía unas horas que había llegado y había sido Haiden quien había ido a recogerlo al aeropuerto y el primer lugar donde habían ido había sido la comisaría para hablar con el comandante. Makoto ya había hablado con él antes de volver a Tokyo y ahora Sano estaba pidiendo poder encargarse de la investigación donde estaban implicadas las pandillas de Tenjiku y ToMan. Al final, después de insistir, el comandante aceptó que Makoto se encargase de ese caso, aunque el comandante no estaba muy convencido.