Capítulo 7

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-Rine, ¿podemos comprar esto?-pregunta Travis enseñándome una bolsa de gominolas.

-¿Llevas dinero para pagarlas?-él acota la cabeza y hace un puchero.

-No.

-Pues entonces no hay chuches.

-Yo te las compro.-dice Jake mientras yo voy empujando el carrito. Dios, nunca me habría imaginado que ir a hacer la compra con un chico fuese así. Es decir, Mary y yo siempre nos turnábamos para ir a hacer la compra.

-Si luego no puede dormir por el exceso de azúcar te harás tú cargo.-le digo a Jake mirándolo recriminatoriamente. Parezco la madre de Jake y Travis y los dos son más mayores que yo, por lo que deberían ser más maduros. Se ve que la naturaleza ha decidido hacer lo contrario. Travis quiere llevarse a casa todas las bolsas de dulces que encuentra, pasando por las gominolas a la nutella y los chocolates. Jake, en cambio, no para de coger bolsas de patatas fritas y snacks salados. Supongo que no tienen muy claro el concepto de comida sana.

-Travis, deja esa bolsa de regaliz. Jake, las patatas fritas no cuentan como vegetal. Ahora, par de ineptos, os voy a enseñar lo que es la comida sana.

Después de dos horas regresamos al apartamento cargados con la compra del mes. He estado veinte minutos explicándole la diferencia entre las judías verdes y las judías blancas a Travis ya que cuando le he pedido un bote de judías me ha traído un bote que no sé de dónde ha sacado lleno de judías verdes. Y hemos tardado otros veinte minutos más porque Travis y Jake no han podido resistirse a ligar con las cajeras, dos latinas de más o menos unos veinticinco. Así que aquí estoy, por fin cocinando la maldita cena dos horas después de lo que me esperaba. Me suena el móvil y dejo a Jake y a Travis vigilando la tortilla. Supongo que serán capaces de evitar que se queme. Miro la pantalla del smartphone, y veo una foto que le hice a Calum antes de que se marchara.

-Hola pelirroja.

-Hola Cal. ¿No es muy tarde para que estés despierto?

-Creía que en Cambridge eran las nueve. Aún es temprano.

-Y en Cambridge, Massachusetts, son las nueve. Pero en Inglaterra son las dos de la mañana ¿me equivoco?

-Para nada. Pero no podía dormir. Así que he decidido llamarte.

-Vaya, qué considerado. ¿Qué tal todo por Stonehenge?

-Muy bien. Estoy aprendiendo mucho y también estoy descubriendo nuevas teorías sobre el monumento. Es muy emocionante cuando expertos te hablan usando tecnicismos y los entiendes, ¿no te pasa?

-Sí. Cuando un juez o un abogado habla sobre el código penal o las leyes aplicadas en un caso sobreseído es gratificante sentir que tus esfuerzos sirven para algo.

-¿Qué tal todo con mi hermano?

-Bien. Lo he salvado de una intoxicación por ingerir comida en mal estado. Hacía meses que no iba a hacer la compra.

-Sí... Trav nunca fue muy bueno con eso de vivir solo. Cuando estaba en Seattle y lo fui a visitar, su casa era un desastre.

-Cuando yo llegué aquí también. Restos de comida, ropa sucia por el suelo...

-Mi hermano es un desastre. Mi madre siempre se enfadaba con él en casa por cómo estaba su habitación.

-Lo sé.

-Tú sabes muchas cosas, Katherine Jules Howkings.

-Sinó no me habrían concedido una beca en Harvard, Calum Augustus Jordan.

-Buen razonamiento. Oye. Te tengo que dejar, creo que he despertado a Harry, mi compañero de cuarto en el hotel.

-Está bien. Hablamos mañana. Adiós Cal.

-Adiós Rine. -Cuelgo y cuando vuelvo a la cocina encuentro a los dos chicos abriendo las ventanas y dando golpes en el aire con trapos por el humo que sale de la cocina.

-¿Se puede saber qué ha pasado aquí? ¡Creía que seríais capaces de vigilar una triste tortilla!

- Bueno, es que Travis se ha puesto a jugar con su móvil y no se podía pasar el nivel del Red Ball así que lo he ayudado y... Bueno, cuando nos hemos dado cuenta la tortilla se estaba quemando y Travis quería hacer otra él solo pero ha echado los huevos en la sartén y ha empezado a salir humo... -Dice Jake, mirando al suelo como un niño pequeño que espera su reprimenda.

-¿Me estáis diciendo que casi se incendia la cocina porque Travis no se podía pasar el nivel de un estúpido juego?

-Un estúpido juego no. Necesitaba pasarme ese nivel para desbloquear el siguiente episodio.

-¿Y tú eres el estudiante de ciencias empresariales que conocí? ¿El que se acuesta con una diferente cada noche?

-He intentado ser más agradable contigo y dejarte dormir. Mis chicas suelen ser algo ruidosas. -dice, guiñándome un ojo. Pongo los ojos en blanco y saco la sartén del fuego. Cuando todo el humo ha salido de la casa, me pongo a hacer la cena otra vez con los dos idiotas lejos de la cocina. Creo que se han quedado viendo un especial de Friends. Suena el timbre y voy yo a abrir, primero sacando la sartén del fuego con la última tortilla hecha.

-¡Pelirroja!¿Puedes abrir?

-¡Ya voy!-abro la puerta y me encuentro con una morena de ojos azules y curvas escandalosas. Y ahora mismo me está mirando muy mal. Sólo lleva un camisón muy fino y corto de verano a pesar de estar a finales de noviembre.

-¿Tú quién eres?¿Dónde está Travis?

-Soy Katherine, la compañera de piso de Travis. Él está en el salón viendo la televisión con Jake. -La chica entra con toda la confianza y me la quedo mirando un tanto alucinada. Se asoma a la puerta de la sala de estar.

-¡Juliet!¿Que haces aquí?

-Venir a ver a mi vecino favorito. Es que he visto que salía humo de la ventana de tu cocina y me he preocupado.- Oh, venga vamos. ¿En serio?

-Nada. Rine se ha distraído hablando al teléfono y nos ha dejado solos en la cocina con una tortilla en la sartén. Nada más.

-¿Juliet, puedes marcharte? Estamos a punto de cenar.-dice Jake, con una mueca de desagrado. Supongo que Juliet venía con esperanzas de acostarse con Travis. Se va con una mueca de desagrado hacia mí.

-Chicos, cena lista. ¿Cenáis u os quedáis viendo la tele hasta las dos de la mañana?

-Ahora vamos. -contesta Jake. Me siento en la mesa y empiezo a comer sin los chicos.

-¿Pensando en mí?

-Ya quisieras.-le contesto al ojiazul.

-Buena tortilla. Creo que te contrataré de cocinera personal.

-No me ocupes a Rine, que debe estar conmigo. No quiero volver a la vida de pizza y comida china.

-Ya estás intentando dar pena, Travis. Vecino, es una táctica muy vieja para llevarte chicas a la cama.

-¿De veras te funciona?

-Sólo con las que van de estrechas. Pero al final acaba pasando lo mismo. Nadie se resiste a mis encantos, pelirroja.

-Ya veremos. Tal vez seas tú el que no se resista a mi encanto.

-Eso ya está demostrado. Estoy loco por tí.

-Me conoces desde hace mucho.

-Sí, es verdad, pero nunca te había tenido tan cerca.

-¿Podéis parar de hacer esto, sea lo que sea? Me hacéis sentir invisible.

-Vale. ¿Cómo esta Kylie?

-Bien. Bueno, la dejó su novio la semana pasada.

-Vaya.

-¿Quién es Kylie?

-Su hermana. Está estudiando en Nueva York.

Ellos se van a mirar una peli y yo me voy a duchar. Mañana voy al juzgado estatal y quiero estar bien.

Holaaa! ¿Cómo estáis? Soy la propietaria de la cuenta, no Rine. ¿Os está gustando la novela? Como no comentáis, no votáis... Pues no sé si os gusta o no. ¡Decid algo!

Compañeros de pisoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora