𝐁𝐄𝐒𝐓 𝐘𝐄𝐀𝐑𝐒 | Beverly Mason, más conocida como la personificación de Adrik Cash.
Prácticamente criada en la cantera del Fútbol Club Barcelona. La chica se mudó a la capital catalana a los once años, y casualmente un chico de su edad también...
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Pablo Gavi
-You don't have afraid to put your dream in action, you're never gonna fade, you'll be the main attraction...
Bev iba murmurando la letra de Make it shine de la serie Victorious. Me acuerdo que cuando era pequeño siempre la encontraba en su habitación viendo esta seriaza, y nos quedábamos los dos viéndola.
Nos acabamos de bajar del autobús para montarnos en el avión, Bev llevaba los cascos puestos para no escuchar las preguntas de los periodistas como siempre hacía. Quería sentarme con Beverly en el avión, pero Paula me había escrito preguntándome si me sentaba con ella.
Bev no me había dicho nada, pero ella es así, siempre espera a que la pregunten antes porque le da vergüenza, y si le dicen que no, se evita la humillación.
- ¿Con quién te vas a sentar en el avión? - decidí preguntarla cuando entramos en una zona especial para esperar al vuelo.
- No sé. - dijo distraída. Creo que le voy a pedir que de siente conmigo. - ¿Y tú?
- Estaba pensando en sentarme contigo otra vez. - hablé con una sonrisa. - Si tú quieres, claro.
Ella sonrió tímidamente y asintió.
- ¡Me pido la ventanilla! - grité.
- Vale, también me gusta el pasillo.
- ¿Beverly Mason aceptando algo sin protestar? Lo veo y no lo creo. - bromeé.
- Gilipollas. - dijo riéndose.
Entonces divisé a la pelirroja poniéndose delante de Beverly y yo.
- ¡Hola, Gavi! ¿Te sientas conmigo? - dijo entusiasmada. Vi como Beverly hacía el gesto típico de Draco Malfoy -mirar de arriba abajo y luego levantar las cejas y curvar los labios hacía abajo-. Me daba un poco de pena decirla que no, pero yo ya había decidido sentarme con la rubia.
- No, lo siento. Me voy a sentar con Bev. - dije abrazando a la de ojos azules.
- ¿Enserio? - preguntó Paula.
- No, en broma. - dijo Beverly poniendo su cara de todas las mañanas.
- Bueno, tampoco hace falta ponerse así, ¿no? - dijo mirándome a mí.
- Tira. - volvió a hablar Beverly.
- ¿Porque tú me lo digas? - dijo irónica la pelirroja.
- Sí. Venga, tira. - dijo chasqueando los dedos en dirección a otra línea de asientos.
- ¿Sabes qué? Me voy a sentar aquí. - dijo sentándose en el asiento que había a mi otro lado. Pedri se acercaba para sentarse ahí y cuando la vio, bufó y miró a Beverly, que le lanzó una mirada como diciendo "¿y está qué?". El canario asintió concordando con ella y se sentó en el asiento de la derecha de Bev.
