Capítulo 14❤️

7.3K 530 375
                                    

El demonio bajo la cama.

Me di un baño y me acosté sobre mi cama a leer la revista que acababa de comprar. Ya era de noche, pero me había puesto solo un short negro de mezclilla y una camisa azul de botones en lugar de un pijama.

Después de leer un largo rato, escuché un ruido en la ventana y sonreí como estúpida al saber de qué se trataba. Me apresuré a levantarme y a abrirla.

— ¡Hola, preciosa! —saludó Eddie y yo ayudé a entrar.

— ¡Hola, mi amor! —me lancé a sus labios.

Eddie me besó con la misma emoción que yo por un largo rato.

— ¡Te extrañé! —susurré.

—Yo igual ¡Me moría por verte!

—Y hoy no está papá en casa —le puse una mirada coqueta.

— ¿Qué me estás pidiendo con eso? —preguntó con voz ronca.

—Lo que quieras, Munson —sonreí.

—Primero que nada ¿Cómo les fue a ti y a Robin? —me miró atento.

— ¡Super bien! Papá nos dio dinero, fuimos a Starcourt con Jane y una amiga de ella y nos compramos algunas cosas —expliqué emocionada.

No le quise contar en mal rato que pasamos con Jason y Chance.

— ¿A ti cómo te fue con los chicos? —lo tomé del brazo y nos sentamos en la cama.

— ¡Bien! Muy bien también —sonrió—. Fuimos a cenar y después fuimos a ensayar un rato a casa de Gareth.

—Algún día quisiera verte tocar junto a tu banda —sonreí.

Eddie me miró emocionado con un peculiar brillo en los ojos.

— ¡Cuando quieras, amor! Me avisas y te llevo para que nos veas tocar.

Me derretía que me dijera "amor".

Me acerqué a sus labios y lo besé sin responder a su propuesta.

—De verdad te extrañé —susurré entre besos.

—Yo igual —respondió de la misma manera.

Lo bese lentamente y le ejercí presión en el torso para obligarlo a que se recostara. Lo seguí sin dejar de besarlo hasta quedar acostada a un lado de él.

Él me tomó de la nuca y me besaba con mucha energía mientras yo me limitaba a controlar mis manos y poner una sobre su pecho mientras me sostenía con la otra.

Eddie acariciaba mi nuca, mi cuello y llegaba hasta mis hombros. Yo lo tomé de su marcada mandíbula y lo pegaba más a mis labios.

Comenzó a desabrochar los botones de mi blusa y a besarme con más intensidad.

Yo estaba nerviosa al pensar que mi puerta no tenía seguro.

—¿Está tu hermana en casa? —susurró, como respondiendo a mis preocupaciones.

—Si, está en su cuarto —susurré.

Eddie se levantó y le puso seguro a la puerta. Caminó hacia mi cama y arrancó la frazada que tenía doblaba bajo las almohadas, la extendió en el piso sobre la alfombra.

Me miró con mucha decisión y me ofreció su mano, la acepté y me levanté para quedar frente a él.

—Si lo hacemos en la cama nos va a escuchar, hay que hacerlo en el suelo —susurró.

Yo lo miré asustada, me gustaba la idea, pero me asustaba su determinación.

—No seas tímida —dijo tomándome de la cintura.

La hija del Policía ﹝+18﹞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora