Capítulo 38❤️

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La lagartija.

Eddie me dejó en casa después de la escuela y quedó en volver por mí más noche para ir a cenar a su casa.

Joyce había ido a pasar la tarde con mi hermana y conmigo para ayudarme a hacer una tarta de queso y llevarlo a la cena. Realmente hicimos dos, el que me llevaría y uno que se comieron en casa.

Me puse un vestido negro sencillo y pegado al cuerpo, encima un suéter abierto color lavanda y unas Converse negros, altas.

—¿Estas nerviosa? —preguntó Jane.

—No, no lo estoy —respondí.

Ella estaba acostada boca arriba en mi cama con la cabeza colgando mientras me veía terminar de alistarme.

—A mí si me da nervios ir a cenar con la familia de Mike, aunque su mamá sea muy agradable —admitió.

—¿Cómo vas a comparar al papá de Mike con el tío de Eddie? Wayne es un hombre muy agradable y me emociona ir a cenar con ellos.

Terminé de maquillarme y mientras guardaba mis cosas fijé la mirada en un pequeño tablero que tenía sobre mi escritorio. Era para poner papeles importantes y ahí había colgado algunas de las fotos del cumpleaños de Eddie junto con la que él me había dedicado tiempo antes.

—¿Qué hiciste con las fotos tuyas y de Mike que te di? —pregunté a mi hermana, sentándome a su lado.

—Las guardé, sólo voy a poner una de Mike en un marco y la dejaré en mi buró.

—¡Qué lindo! —respondí con sarcasmo.

Quería burlarme un poco, pero me detuve al escuchar que tocaron la puerta.

—Debo irme —me levanté de un salto. Tomé mi bolsa y corrí a abrir la puerta—. ¡Hola, amor! —sonreí al ver a Eddie.

—¡Hola, hermosa! —respondió con la misma sonrisa.

—¡Qué elegante te ves! —lo miré de pies a cabeza.

Llevaba una camisa de color azul marino con líneas blancas y las mangas enrolladas hasta medio brazo, encima tenía un chaleco de nylon del mismo tono de azul. Usaba pantalón de mezclilla y sus botas militares negras.

Me agradaba que pudiera verse elegante cuando la ocasión lo ameritaba, pero sin perder su estilo.

—Iré a cenar con las personas más importantes de mi vida. Debo verme bien —respondió entrando a la casa y me besó—. Mírate tú ¡Te ves muy hermosa! —me tomó de la mano y me hizo girar para poder verme mejor.

—¡Gracias! —respondí ruborizada.

Papá y Joyce salieron de la cocina.

—¡Hola! Buenas noches —saludó Eddie.

—¡Hola Eddie! —respondió Joyce.

—¿Qué hay? —dijo mi papá con un plato de cereal en mano.

—Llevaré a Emma a cenar con mi tío y la traeré más tarde.

—Me saludas a Wayne —dijo con la boca llena.

—¡Sí, claro! —sonrió.

—No olvides esto —me dijo Joyce con la tarta en sus manos.

—¡Oh si! —me acerqué a tomarla y aproveché para despedirme de ella. Miré a papá y lo abracé—. Vuelvo en un rato más —anuncié riendo porque tenía el bigote lleno de leche.

—¡Cuídate mucho! —respondió y me besó la mejilla, dejándome restos de leche.

—Mas tarde volvemos —dijo Eddie mientras salíamos.

La hija del Policía ﹝+18﹞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora