Exámenes, Apariciones y ¿El padrino de Harry?

183 18 6
                                    

La semana de exámenes llegó y justo después la última semana de clases antes de entrar a las anheladas vacaciones, me encontraba concentrada en justo mi último examen que era de historia de la magia cuando siento una mano adentrándose muy discretamente en mi túnica queriendo llegar a mi muslo, a Fred lo sentaron por suerte justo a mi lado, pero tener a un novio horno y un exámen importante en la misma mesa no ayudan, saque su mano de mi túnica y comencé a terminar el exámen, me levanté molesta(no enojada pero si hablaría de las hormonas de mi novio después), y salí del salón tras el visto bueno del profesor, esperé a que salieran mis amigos, y el primero en salir con puchero incluído fue mi novio.

–¿Por qué quitaste mi mano?--preguntó preocupado

–Porque por más que me gustaría que hicieras eso en clase–lo acerque por la túnica para que me acorralé en la pared– no me gusta que lo hagas en un exámen y menos si sabes que es importante para mi, debes controlar tus hormonas Freddie– lo mire inocente mientras tentaba sus labios para un beso que él comenzó con desesperación

–Es que contigo a un lado mis hormonas saltan amorcito–volvió a hacer un puchero escondido su cabeza en mi cuello–, eres muy linda para mis hormonas

–lo sé Freddie–dije riéndome con ego–, creeme que aveces te veo y quiero que me empotres a la pared– levantó la cabeza viéndome a los ojos con una sonrisa muy sugerente–, no ahora–su sonrisa volvió al puchero y a mi cuello–, pero debes comportarte imagínate que tu madre nos encuentre haciendo algo así o mi padre, no quiero quedar viuda antes de casarme

–¿Te quieres casar conmigo?--me miró a los ojos con una sonrisa de ego a más no poder

–Ay no–me queje al ver su cara–, ya viene el Fred orgulloso y con Ego alto

–Claro que mi ego es alto, cuando estás tan loca por mi que te quieres casar conmigo–se burló de mí mientras me daba besos en las mejillas

–No debí decirte eso ¿cierto?--dije con una mueca de arrepentimiento

–No, porque ahora tu esposo estará increíblemente insoportable–recalcó el "tu esposo" que me hizo reír por su cara de ego alto y atraerlo a un beso

Los chicos salieron unos diez minutos después un poco decaídos, con la angustia de saber si lo hicieron bien, las calificaciones llegaron hasta nosotros una semana después, como hice los 12 TIMOS los pasé con excelentes notas y fui una de las mejores junto a una orgullosa Marley con 11 TIMOS y una Angelina con 9, los gemelos y Lee se conformaron con tres TIMOS.

El verano llegó a salvarnos la vida y la mitad del primer mes llegó con apariciones nuevas.

–Abuela qué haces aquí, pensé que nos veríamos en México–le pregunté a la delgada mujer parada frente a mi puerta mientras la abrazaba con cariño

–tu madre nos dijo que no podrían asistir, otra vez, este año así que tu abuelo y yo decidimos venir, tu madre me acaba de contar que ya tienes novio ¿no es así?--preguntó mientras movía las cejas

–pues que chismosa es mi mamá–se rió de mi mal chiste–, pero si, ya tengo novio, de hecho viene en el fin de semana con su gemelo–dije recordando que quedamos con los chicos de que me visitarian los fines de semana cada 2 semanas

–qué bueno porque tu abuelo se acaba de enterar y quiere darle con el machete–nos reímos y se sentó junto mi en mi cama– cuéntame de él

–pues es pelirrojo, alto, delgado, tiene unos brazos muy formados por que práctica quidditch y es muy buen chico, seguro te caerá bien–dije con un sonrisa boba al pensar en mi amorcito

–Suena muy buen muchacho si lo dices con ese brillo en los ojos y esa sonrisa–suspiró con nostalgia–, aún recuerdo cómo conocí al viejo de tu abuelo, fue en un partido de quidditch por el 54, era un hombre muy serio, pero muy aficionado al quidditch...

𝗨𝗻 𝗰𝗮𝗺𝗯𝗶𝗼 𝗱𝗲 𝗿𝗲𝗮𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱... ¿𝗼 𝗱𝗼𝘀?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora