Veo una habitación completamente ordenada, sabanas azules y paredes pulcras, reviso unos de los cajones del cuarto, encuentro algunos papeles que no me dan tiempo de leer porque escucho unos pasos aproximarse, pero cuando volteo a un escritorio un poco desastroso, noto ahí mi objetivo, los tomó, y escucho los pasos más cerca, mi corazón se disparó y empezó a latir desenfrenadamente. El temor invade por completo mi mente, nubla mi vista, salgo corriendo al baño de la misma pieza, siento unas irreversibles ganas de expulsar la cena de anoche, abro la tapa del inodoro y evacuo por la boca todo lo que mi estómago podia haber tenido. La manilla se mueve con desespero, alguien esta tratando de abrir... al no poder escucho como sus nudillos impactan con la madera de la puerta haciéndome pegar un respingo. Trato de hacer el menor ruido posible, me siento como una maldita espía, antisocial, o la mierda que entre a una casa sin autorización de los dueños.
Santísima mierda.
Necesito salir de aquí, pero no por la puerta...
En la pared que tengo a mi izquierda hay una pequeña ventana, pero lo suficiente grande como para que yo salga... asi que la abro y saco mis piernas al exterior... luego el resto de mi cuerpo, no hay tanta altura pero ya me dio miedo, lo que me hace caer al suelo es que vuelven a tocar la puerta.
Caí en la grama y revise el bolsillo trasero de mi vaquero, tenia algunos billetes. Pare un taxi que iba pasando y le indique el mall. Donde me vería con Chels. Acabo de hacer una completa demencia.Iré al infierno.
Desde la ventana del auto vi la pequeña ventana abierta y como las cortinas de la ducha se movían por el viento.
Nota mental: si, vives solo una vez, pero este tipo de cosas te pueden matar del susto. Asi que, no hacer caso a Raquel.
En menos de quince minutos el taxista había llegado, yo estaba tratando de calmar mis manos que no dejaban de temblar y sudar frío. El llama mi atención emitiendo un sonido con su garganta, yo me incorporó y noto el centro comercial frente a nosotros.
Le paso unos billetes sin siquiera preguntar cuanto era que me iba a cobrar, y bajo inmediatamente.
Diviso a Chels esperándome afuera y buscándome con los ojos, cuando estos dan conmigo su cara pasa de desorientada a aliviada.-¡Dios, Marshall!.-se dirigió a mi.
-Entremos.-hablé entre dientes.
Así que eso hicimos, nos encaminamos a la fuente de soda que primero vimos.-...¿y, entonces?.-sonrió.
-Me debes $18 millones.-le espete.
Ella echó su cabeza para atrás y soltó una carcajada.-Entrar a la casa de Ben no es difícil.-puso los ojos en blanco.
-¡No, no lo es!.-hice énfasis en la primera "o".-¡Cuando entras con su consentimiento, como tu lo hacías!.-estaba que la bofeteaba por decir que fue un trabajo sencillo.-Y además no hurtas cosas.- me sentía misión imposible. En este preciso momento, estoy mil por ciento segura que estoy siendo grabada con cámaras secretas para después ser vista en la televisión por millones de personas. Cuando eso pase, que me paguen.
-¿Agarraste algo... o?.-hizo caso omiso a mi reclamo.
Cuando Marshall se dispone algo, lo logra, claro que había tomado de su escritorio de estudio lo que mi amiga anhelaba: los boletos al concierto de los djjdjsjsje . Nadie le dijo a Ben que publicará una foto de estos, con un mensaje que decía que iría con su nueva chica.
Esto es como venganza, Chels fue muy generosa con el en todos los aspectos, y el un patán... es decir, si le hacía regalos, pero de que valen si al fin y al cabo tienes un desliz con otra tipa.
Así que ayer en la tarde, estábamos viendo la red social, y salía la foto de las entradas, Demonios, lo más interesante es que; como nos encanta esa maldita banda. Así que la idea fue de Chelsea y yo la ejecute. No se porque, solo lo hice. Ademas si que quiero ir, y ya que Raquel no es capaz de meterse a la casa de su ex, lo hice yo.
Ademas tendré una anécdota que contar. Seguro que cuando no encuentre sus entradas se volverá loco buscandolas.
El nos dejo el trabajo fácil, puesto que cuando Chelsea fue su novia el le dio una copia de llaves de su casa, para que fuera a visitarlo cuando le provocará. Ella jamás se la devolvió. El no se acordó de pedirla. Y ¡estas son las consecuencias!
Es que, habíamos tardado...
Dime, ¿que es lo que una ex puede hacer con las llaves de la casa de su ex? Oh, si. Por la mierda.
Ademas estaba todo fríamente calculado. Chels sabía su horario de trabajo, su horario de estudio. Toda su maldita vida.
El salía en la mañana a trabajar y regresaba a mediados de las 2:30. Para después estudiar en la noche. Asi que yo estaba infiltrada en su casa como a las dos, pero el chiquillo se adelanto. O el, o sus padres llegaron de sus viajes comerciales antes de lo previsto.
Porque, si, hasta eso sabíamos.
Somos unas malditas genias. Deberíamos ir a la nasa.
Okey, me calmo. Solo robe unos boletos.
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Mi estrella fugaz.
Fiksi Remajalee algo que te haga sentir viva, que se sienta tan real como el amor, como el dolor. viaja en esta historia a distintos sentimientos. solo hay una vida. solo hay un amor. solo hay un verdadero desgarre del corazón. son solo unos labios los que enc...