Obsesión [2]

[CUARENTA Y UNO]

[ILUSOS]

Aleksey

Alguna vez escuche decir a un hombre que los imperios no caen desde afuera, sino desde adentro. Pues habría que romper a cada uno de los que cuidan los pilares para hacerlo caer y lograr que no volvieran a levantarse jamás en su vida.

Me he leído los diarios de noticias.

Me sé la historia que se cuenta por parte de los rusos y me sé la historia que los alemanes cuentan entre ellos. Y de escuchar ambas, me queda claro que el problema no son las organizaciones ya que años atrás mi abuelo y el delos Kaiser, lograron "compartir" poder. No obstante, el problema inicio con Aren y Aurelio.

Esta pelea no es de Amara y Nicholas.

Esta pelea no es de la Bratva y de la milicia.

Está pelea siempre ha sido del ego de dos hombres, que no aceptan perder.

Las cosas en Moscú se están poniendo intensas, más de lo que una vez podría calcularse. La aparición de Vladimir y ha puesto a correr a Rusia, la guerra de las mafias mantiene a la gente asustada, las elecciones en la milicia mantienen el suspenso y la "muerte" de Anderson, todo lo complica y el hecho de que Amara no aparezca, vuelve un asco esta situación.

Incluso las cosas en la organización están tensas, pues Râzvan se niega a seguir órdenes de otros que no sean mi hermana, Aren no ha salido de su cueva reclamándose por haber bajado la guarida e Iván está a punto de perder la cabeza porque nadie está llevando el control.

Mi padre sigue encerrado en su oficina, su cabeza no parece funcionar bien ante la presión y Stanislav no piensa meterse en los temas de la Bratva porque ya no es rey.

— ¡Trabajan para la Bratva! Muévanse.

No me muevo, simplemente me quedo observando lo que hace.

Iván está furioso, sus hijos ni caso le han hecho y es que cada quien está en su mundo. Kennan se fue de Moscú hace dos días, iba apurado y desde ahí entendí que mis sospechas, eran reales. Mientras tanto, Konstantine no se ha movido del lado de mi padre, lo que ha puesto al suyo más irritable y el que el Vor de los vory v zakonen no le responda, lo tensa.

EL rumano, dejó claro desde hace tiempo que a la única persona que sigue, es a Amara, a nadie más y es lo que Iván no tolera.

— ¡Responde cobarde!

—El cobarde será otro si vuelve a gritarme. —Amenaza y los dos metros de altura, superan a Iván por mucho—. Los vory no le sirven a usted o a su hermano, le sirven a la heredera del trono o al hermano, pues ella ha probado tener más huevos que ustedes y él es más útil que otros como usted o su gemelo.