Capitulo 52 - Bryce

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En vez de bajar los dos a cenar nos quedamos en la habitación buscando la manera de salir de esta lo mejor posible hasta que se nos hizo tarde "Si quieres podemos seguir hablado mañana" Le dije mientras me dirigía a la puerta para irme a mi cuarto. Bryce asintió cabizbaja y me acompañó hasta la puerta para darme las buenas noches como siempre habíamos, y por mucho que hoy no fuésemos a dormir juntos desearle dulces sueños a alguien es un gesto de amor. Bryce se apoyó en el lomo de la puerta y antes de irme vi como las lágrimas se asomaban y me acerqué a ella para abrazarla"Bryce mi amor ven aquí" le dije arropándola en mis brazos "Quieres que me quede un rato?" Le pregunté mientras volvía a entrar con ella.

Chris se sentó en la cama y yo me recosté sobre su falda a llorar como siempre hacia, no entendía como no se cansaba de mis llantos porque una de cada tres veces que pasábamos rato junto yo estaba lagrimeando, así que intenté cambiar la mentalidad y estar por el "Y esa sonrisa?" Preguntó extrañado "Es que si no sonrío no pararé de llorar" le dije quitándome las últimas lágrimas "Es un poco siniestra" dijo riendo "parece que me quieras matar o algo" añadió quitándose la sudadera "bueno matarte tampoco es una idea a descartar" le respondí mientras me levantaba para ir al baño a darme una ducha.

Chris seguía en la misma posición desde que entre, probablemente ya estaba a acostumbrado a las duchas eternas de los dos últimos dos meses y por eso no le importaba esperarse. "Que tal estás" preguntó dejando el móvil a un lado "Supongo que mejor que antes..." respondí metiéndome entre las sábanas "Hay algo que pueda hacer para que estés aún mejor?" En ese momento se me vinieron un millón de ideas a la cabeza, estaba claro que podría hacerme mil cosas para que estuviera mejor, como por ejemplo podía hacerme el amor, pero como todo eso se había ido al aire supongo que me iba a quedar con las ganas, y como este mil y un pensamientos más "podemos ver una peli si quieres" Le dijo fingiendo que era la primera idea que se me había venido a la cabeza. "El otro día me descargue una comedia de estas malas, quieres que la veamos?"

Puse la película al cabo de media hora porque no tenía ni la mínima idea de que era lo que no funcionaba, estaba por cortarme las venas de la rabia que me daba hasta que me di cuenta que era la televisión que no estaba bien sintonizada, ridículo verdad? Antes de acomodarme con Bryce me fui a su armario a coger la tableta de chocolate que siempre tenía escondida "como sabias que eso estaba ahí" preguntó riendo cómo si no hubiera estado casi dos meses durmiendo con ella "Uno sabe lo que sabe..." le respondí metiéndome en la cama con ella. Bryce me quitó la tableta de las manos y se la guardo para más tarde "si la abres ahora a media peli no tendrás nada que comer, entrenador de raptores" dijo mirándome con una carita de ángel.

La peli a mi me encantaba, no había ningún momento en que no me riera y con el chocolate que me dio Bryce la noche de hacía genial, para mi claro porque ella como siempre hacía se quedó dirimida en los primeros diez minutos de película. Cogí el móvil para ver cuanto quedaba y como era mucho, decidí apagar la tele y acostar bien a Bryce para que durmiera la mejor posible. Le quite el chocolate de las manos, le puse bien la manta y le acomodé el cojín. Luego me puse la sudadera y cogí mis cosas para irme a descansar y antes de salir de la habitación le di un beso en la mejilla para desearle buenas noches.

Cuando salí de su habitación Justo me crucé con Colin que volvía de la sala cine junto con Dewanda y Laura y no supe bien bien como reaccionar "Que hacéis aquí tan tarde?" Les pregunté incómodo "Que hacíais tú y Bryce juntos a estas horas? "Nada... buenas noches" Contesté entrando rápido a mi habitación.

Lo primero que hice fue entrar al baño y mirarme al espejo con la misma energía de alguien que gana un primer premio, me coloque bien el tupé y lance un par de besos a mi propio reflejo. No estaba contento por verme guapo, que también, sino porque había conseguido calmar las aguas con Bryce que era mi principal objetivo desde ayer por la noche. Había conseguido aclarar las cosas con ella, pasar rato con ella y lo más importante, estar bien con ella.

Después de tanto coqueteo en el espejo me metí en la ducha otra vez y no tarde en meterme en la cama a dormí. Había que reconocer que se me hizo raro no tenerla al lado ni tampoco tener a nadie a quien abrazar y dar mimos, pero supongo que con el tiempo se me iba a pasar.

Cerré los ojos para dormirme y antes de caer en mis sueños me vino un flashback a la mente... que casualidad que me viniera en es momento tan inapropiado...

Bryce salió de la ducha renovada después de su peor día de rodaje, tenía la cara iluminada las mejillas rosadas y una sonrisa que podía animar hasta el alma más atormentada del mundo. Se vino a dentar encima mío quedando los dos a horcajadas, le cogió de las mejillas y me empezar besos sin parar "me encantas" dijo mientras se tomaba una pausa para coger aire y después seguir.

Le puse las manos en la cadera y de un vuelco quede por encima suyo "y ahora que harás?" Le dije con picardía "que vas a hacer tú? Me respondió dándome un beso. Ante esa pregunta tan sugerente, me quite la camiseta y los pantalones quedando en ropa interior, y me dispuse a deshacer el lazo de su albornoz. Lo que me encontré debajo no me sorprendió, era la misma obra de arte que siempre pero las ganas que nos teníamos me hacían mirarla con otros ojos.

Chris se agachó lentamente y muy despacio me empezó a dar besos por todo el torso, era una sensación majestuosa la del tacto de sus labios húmedos con las cosquillas que me hacía su bigote recién afeitado.

Fue bajando con sus besos hasta que se topó con mi pelvis "si quieres seguir bajando te lo tendrás que ganar" "Eso esta hecho" respondió callándome con un beso.
Le cogí la mano derecha y de forma muy seductora le lamí sus dedos mágicos, los cuales en menos de dos segundos ya estaba dentro de mi provocándome un gran escalofrío. "Ufffff" murmure poniendo los ojos en blanco "Así si.." añadí riendo por dentro

Mientras que con una mano le abría las puertas al cielo, la otra la usaba para trazarle pequeños círculos para hacerla llegar al punto más álgido lo antes posible. Aquella fue una idea brillante puesto que no tardó ni dos minutos en caer rendida encima de la cama suspirando y pronunciado las tres mismas palabras de siempre "Chris" y "Te quiero"

Las piernas le temblaban y el cuerpo se le arqueaba a la vez que trataba de calmar la respiración, ella siempre me decía que era la mejor sensación que le provocaba y que nunca se cansaría de ella, lo que era genial porque verla disfrutar así me hacía quererla aún más.

"Chris quiero más..."

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