Capítulo 45 - Chris

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Bryce no paraba de moverse entre las sábanas y de resoplar en signo de frustración. Minutos más tarde se levantó de la cama como pudo y cogió el móvil que tenía cargando en la mesita. Salió al balcón cerrando la puerta detrás suyo y se sentó en la tumbona que había para hacer una llamada.

- Bryce? Oí al otro lado del teléfono

- Mamá! Dije con la voz quebrada

- Que ilusión me hace esta llamada, que tal va todo?

- Bf... dije con la voz quebrada, en general va todo bien, pero es que... ahora estoy de bajón.

- Porque, que te pasado?

En ese momento caí en el peligro de esa llamada, si le contaba todo lo que me pasaba por la cabeza en ese momento probablemente se alarme ella y toda la familia, justamente lo que menos m interesa ahora, así que recapitule y me pensé dos veces lo que le iba a decir

- Nada... En el fondo es una tontería

- Ay hija, porque no dejas de guardarte las cosas para ti y empiezas a hablar con los demás... Sabes que eso es muy bueno, y te lo dice todo el mundo, comparte tus sentimientos, ábrete a los demás...

- Hace unas horas me he torcido el tobillo.., y me duele mucho, dije empezando a llorar, ha sido haciendo una tontería te lo juro, pero ahora tengo miedo de que sea algo grave y afecte al rodaje.

- Bryce mi amor, ni se te ocurra preocuparte por el rodaje, una tontería la puede hacer cualquiera y le puede salir mal a todo el mundo, tu estate tranquila, no te agobies por el resto, y si en algún momento notas que se complica siempre puedes pedir ayuda, - Se lo has contado a alguien?

- No... Bueno Chris

- El lo sabe?

- Mhm, me ha traído hielo

- Eso es genial, me encanta que se preocupe por ti

- Se preocupado demasiado, dije riendo mientras lloraba

- Pero siempre está cuando le necesitas, no?

- Si... aunque no se...

- No sabes que?

- Siento que no estoy haciendo las cosas bien con el

- En que sentido?

- El siempre está dispuesto a ayudarme y a hacer cualquier cosa pero yo no... no se como abrirme más a el, no se como contare lo que siento ni las cosas que me pasan por la cabeza porque... yo que se. Y me da miedo que se piense que es porque no confío en el.

- Bryce poco a poco, no te estreses. El te quiere con locura y sabe que tú a él también, Chris te conoce como si te hubiera parido y sabe como eres, el sabe que te cuesta expresarte y abrirte con los demás y aún así te quiere y te da tu espacio para que lentamente vayas abriéndote a el. Chris es un gran compañero y estoy increíblemente agradecida de que hayas podido vivir todo esto con el a tu lado, de echo espero que una vez terminéis sigáis "juntos"

- Ojalá, dije en tono triste

- Tiempo al tiempo...

- Tiempo al tiempo, le respondí, Te quiero mamá

- Y yo a ti mi vida, buenas noches.

Colgué la llamada y me quedé ahí sentada llorando como si no hubiese un mañana. Me rompía por dentro no poder compartir con Chris todo lo que me pasaba aún sabiendo que podía confiar en el.

Mientras pensaba en todo esto, la otra mitad del cerebro la tenía destinada al nuevo problema, el tobillo. Apoye el pie en la tumbona y lentamente me fui quitando el vendaje para ver cómo estaba y en ese momento se me cayó el alma a los pies.

Tenía un moretón enorme y el talón hinchado como un globo, las lágrimas empezaron a salir aún con más ganas y las ganas de enterrarme bajo tierra también.

Pasados unos minutos pude empezar a controlar mi estrés y mi angustia, haciendo que el ataque de pánico que estaba empezando a sufrir se desvaneciera lentamente. Me armé de valor, y a la cuenta de tres me levante y me fui a la cama a descansar un rato y olvidarme d todo.

Después de casi una hora fuera volvió a entrar, la luz que entraba desde fuera iluminaba ligeramente su rostro y pude ver los rastros de lágrimas en sus mejillas, me rompía el corazón verla así de débil.

Antes de meterse en la cama dejó en el suelo el vendaje que le hice con la bolsa de hielo, se deshizo el moño, se quitó la ropa hasta quedarse en ropa interior y luego, palpando con las manos busco mi cuerpo por la cama.

Dejó caer su cuerpo lentamente encima de mi torso, entrelazó sus piernas con las mias y luego con su brazo cogió mis manos y las colocó por detrás de su espalda haciendo que quedásemos abrazados.
Luego cogió la manta que quedaba a la altura de mis muslos y la subió hasta quedar cubiertos hasta el cuello listos para dormir.

Bryce tenía la cabeza en mi clavícula y la frente descansando debajo de mi barbilla para estar lo más juntos posible. - Antes de dormirse me paso una mano por pecho y me dio un beso en la barbilla mientras me daba otra vez las buenas noches.

Continuará...

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