Invisible (kookV)

Capítulo 33 (Yo me caso contigo ahora mismo)

La clase se desarrolló con toda normalidad, mientras que en la cabeza del Pelirosa se abría un gran abanico de posibilidades para poder autoconvencerse, no quería aceptar bajo ningún termino que Taehyung se hubiera dejado besar por Jackson, realmente había sido muy extraño todo, solo esperaba que sus apariciones con tan poco tiempo de diferencia fueran una simple casualidad.

Una vez el profesor empezó a despedirse de los alumnos, Taehyung quiso voltear para mirar a Jungkook, pero al instante la mano de su amigo se posó sobre su muñeca y lo apretó con mucha fuerza. El Peliazul lo miró sorprendido y aunque quiso gritar por el dolor, se aguantó como todo un campeón.

Todos se estaban preparando para salir con sus mochilas, más los dos amigos se mantenían inmóviles y en silencio. De pronto Taehyung vio a Jungkook caminar hacia la puerta, esto lo alarmó en gran manera, sabía que tenía que reaccionar rápido, se apoyó con la mano libre sobre el pupitre y se impulsó hacia arriba, pero solo logró despegar el trasero de la silla apenas unos centímetros, porque rápidamente, su Soulmate lo frenó y un muy triste Peliazul se tuvo que volver a sentar.

Miró a Jimin de reojo mientras formaba un puchero con sus labios, Taehyung solo quería invitar al Azabache a almorzar con él, después de todo ahora eran amigos.

Jimin y Taehyung eran dos estatuas muy bellas, el Peliazul muchas veces se preguntó así mismo que carajos le pasaba al Pelirosa, estaba muy extraño, hasta parecía enojado.

Una vez quedaron solos, Jimin soltó la muñeca de su amigo, se movió con lentitud y lo enfrentó cara a cara.

—¡Dime Tae!, por favor, di que no fue Jackson el que te dejó esa marca— El enojo había desaparecido, sus palabras sonaron a suplica.

Taehyung se sorprendió ante lo que escuchó y así como si el peor de los pecados hubiera salido de esa boca, se llevó ambas manos a la marca y negó con la cabeza frenéticamente.

—¡Claro que no!— Contestó con firmeza.

El alivio llegó como una suave caricia sobre el cuerpo del Pelirosa, pero así como vino, se marchó, al instante incertidumbre otra vez.

—Pero si no fue el, entonces, ¿Quién?— Cuestionó pensativo.

Taehyung al instante se puso en modo tímido 2.0, su rostro se tornó completamente rojo.

Jimin se llevó el dedo índice al mentón y comenzó a divagar entre las muchas personas que buscaban a Taehyung para intentar encontrar al responsable.

—Jung no, tal vez Kim, mi hermano imposible, talvez sea...— El Peliazul no aguantó más y lo interrumpió.

—¡Fue Jungkook!— Exclamó con rapidez.

Jimin en ese preciso momento tenía la mandíbula que le llegaba hasta el piso, no podía creer lo que estaba escuchando.