Invisible (kookV)

Capítulo 30 (¡Kim Taehyung!)

Jungkook estaba en la luna, los ojos clavados a un maniquí que llevaba un vestido naranja con pequeñas flores amarillas. Estaba tan absorto en sus pensamientos que ni siquiera podía escuchar a la chica que lo estaba llamando.

Suni se acercó a él, lo agarró del hombro y lo movió un poquito, el azabache dio un saltito en su propio asiento todo asustado.

—¡Perdón si te asusté!— Exclamó la chica un poco sonrojada.

Jungkook la miró y se contagió de su color.

—¡Lo siento estaba distraído!— Se excusó en voz baja.

Suni solo le sonrió y luego se alejó para ir y a posar frente a él.

—¡Te traje para que me ayudes a escoger un buen vestido y no me dices nada, ni siquiera una simple opinión!— Le reclamó mientras hacía un puchero.

Jungkook llevó la mirada a sus labios, eran bonitos y estaban ligeramente pintados en un tono coral, pero ... "No son como los de Tae", se dijo así mismo, pero antes de que su memoria comenzará a viajar a lugares a los cuales no quería ir, se pellizco disimuladamente la rodilla, el suave dolor lo espabiló, así se pudo concentrar en su compañera.

Suni era una chica muy hermosa, con una gran sonrisa y un bonito cabello largo y castaño, ¡Jungkook no se podía quejar!, sumado a eso se había comprometido a acompañarla a escoger un bonito vestido para una fiesta que tenía el fin de semana.

La miró y ella estaba ahí, radiante con un vestido azul que le llegaba por arriba de las rodillas y con un escote en la espalda que llegaba a la cintura. Su figura se veía espectacular en él, el color hacia resaltar mucho su tono de piel y sus ojos oscuros.

—Ese vestido se ve perfecto en ti— Le dijo el azabache con toda sinceridad.

Suni se puso de color bordo, se encogió de hombros y lanzó una pequeña risita nerviosa.

—¡Entonces me llevo este!— Dijo para luego empezar a dar vueltas frente al espejo toda emocionada.

Por su parte Jungkook Clavó la mirada en la parte de la falda, no por que quisiera mirar alguna cosa, el azabache no era ese tipo de chico, fue más bien porque el movimiento de la tela lo capturó. El hermoso azul brillante, tan hermoso como el color de ... "Su pelo."

Miró sus dedos y recordó como ellos se deslizaron en los suaves y delicados cabellos de Taehyung, y como si fuera magia, sintió su perfume llegar a su nariz. Le siguió la sensación del calor de su cuerpo y el brillo de sus preciosos ojos claros. Jungkook se perdía tan fácilmente entre esos recuerdos porque añoraba tanto volver a vivirlos, aun estando ahí con Suni a punto de dar un gran paso y el definitivo, Taehyung seguía siendo su dueño.

Después de comprar el vestido, Suni arrastró a Jungkook a su cafetería favorita, aunque iban a cenar en su casa no quería que el azabache se fuera sin probar la exquisita torta especialidad de la casa. Ambos se sentaron y esperaron a ser atendidos, cuando el mozo llegó para hacer el pedido Suni pidió solamente las dos porciones. Charlaron apenas unos pocos minutos ya que al instante tenían los platitos con el trozo de torta frente a ellos.