Invisible (kookV)

Capítulo 41 (Invisible)

Jungkook estaba pasándola fatal, cada minuto le sabía tan amargo al no saber nada de Taehyung, el fin de semana estaba a la vuelta de la esquina y él tenía que preparar todo para que saliera bien. Pero era tan inevitable que las malas sensaciones lo sacaran de sus planes, no podía evitar sentir dudas sobre lo que estaba haciendo. Todo esto no pasaba solamente por el dichoso evento, sino más bien por el regalo que tenía preparado para Taehyung, él había puesto todo lo que quería decir , pero ¿sería suficiente?

Su guitarra sonaba suave y flotaba en el espacio espejado del salón de danzas, tenía la melodía perfecta y una letra nacida en lo más profundo de su corazón, sabía que tenía que dejar de lado esos sentimientos de insuficiencia y dar lo mejor de él para que las cosas salieran bien, después de eso todo dependería de lo que Taehyung quisiera y él estaba decidido a aceptar cualquier decisión que el Peliazul tomara.

Unos retoques más en la letra y de pronto los sonidos de unos pasos se oyeron a la distancia, rápidamente levantó todas sus hojas del suelo para guardarlas en el estuche de la guitarra, estaba como un ciego moviendo las manos a lo loco, solo cuando al fin notó a Jung Hoseok entrar al salón se detuvo.

—¡Hey Jungkook!, ¿Cómo estás?— Saludó sonriente el Bad boy.

El Azabache tomó la guitarra y la guardó dentro de su estuche.

—Bien, todo bien— Respondió simplemente.

Hoseok lo notó extraño, pero tenía intenciones de indagar mucho más en el asunto.

—Puedes seguir con tus cosas, no me molestas— Acotó sonando amigable.

Jungkook comenzó a caminar hacia la cabina.

—Solo voy a buscar unas cosas y me voy— Respondió el Azabache.

Jungkook entró a buscar un pendrive, una vez lo vio lo tomó y salió directo al salón , pero no se esperaba encontrarse allí mismo a él Bad Boy del campus con una hermosa sonrisa en el rostro mientras leía con mucho interés una fina hoja que sostenía en sus manos.

Jungkook se congeló, ¿acaso guardó todas sus hojas menos esa tan especial?

Hoseok detuvo su lectura y miró a Jungkook apenado.

—¡Lo siento!, creo que no debí leer esto— Sonrió con pena y estiró la hoja hacia Jungkook.

El azabache la tomó con rapidez y al instante se cercioró que hoja había sido la olvidada, al ver que se trataba de la hoja especial no pudo evitar el fuerte movimiento de su corazón, aunque al cabo de los segundos sólo fue un alivio enorme el que lo inundó, después de todo aún la tenía en sus manos y solo había sido leída por un inofensivo Hoseok.

Jungkook rápidamente la guardó dentro del estuche para hacerle compañía a las hojas del borrador, saludó al Bad boy con un simple gesto y se dirigió hacia la puerta de salida.