Elara Bennet es una chica de 17 años, es la hermana mayor de Jamei y Sophie Bennet, se podría decir que su vida es tan normal como se diría, pero en ella hay un secreto el cual será de gran ayuda para los guardines a vencer a una oscura amenaza pret...
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Narra Elara:
Después de 15 años todo esta en calma, cada uno de nosotros estamos cumpliendo con nuestro deber, baje de mi dormitorio a la sala de control pensando en la hora que llegara Jack, mi esposo, nos casamos dos años después de que me pidiera ser su novia, y la boda fue realizada por mi padre, Hombre de la Luna, aquella fue la primera ves lo vieron en su forma humana, estuvo feliz de que Jack sea mi esposo.
En los tiempos libres vamos a visitar a mi familia, como humanos, así era más fácil ya que todos podían vernos (Jack tenia la apariencia de su vida pasada, cabello castaño y ojos marrones, yo tenia el cabello negro y ojos cafes y ambos con tez mestiza) o pasamos tiempo con los guardianes, como hoy que iríamos a ver a mi madre.
Llegue a la sala de control, donde estaban los felino, así les llamamos a mis ayudantes, este lugar es donde vigilamos a las personas y si su Luz del Corazón era bajo intervenía para ayudarlo sino podria caer en la oscuridad, pero no conté con que lo encontraría lleno de nieve y al culpable riendo a carcajadas.
- ¡LUCIAN!
Era mi hijo, bueno mío y de Jack, Lucian Frost Moon, tiene el cabello blanco como ambos, la tez pálida como Jack, sus ojos uno es gris como los míos y el otro es azul como el de su padre, en cuanto a su carácter diria que tiene la combinación perfecta de los dos, ahora tiene 10 años y es travieso como su padre lo era.
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Los guardianes lo adoran, recuerdo que Conejo se enfureció con Jack cuando se enteró de mi embarazo, así que tuve que intervenir y regañar a Conejo, ahora cada vez que se acerca Pascua se lo lleva para que lo ayude ya que dice que hace las mejores pinturas y los niños los aman, Hada lo mima mucho, siempre ocupa una excusa para alguna de sus travesuras, Norte lo ve como un nieto, también lo mima solo que la diferencia es que cuando hace alguna travesura lo regaña y aconseja y Meme lo consiente aunque no como Hada o Norte.
- Oh, que bueno que ya llegaste amor – Jack ya habia llegado, le di un corto beso y vi al pequeño detrás de él – Jovencito ¿Cómo se te ocurre hacer esa travesura? Se supone que deberías estar en tu habitación alistando todo para tus entrenamientos con Hombre de la Luna.
- Eso ya lo hice mamá – respondió aun escondido detrás de Jack.
Mi padre viene seguido al castillo para darle lecciones y enseñarle lo que debe saber ya que en un futuro se convertirá en su sucesor, así lo decidió y soy feliz de por eso. Jack me miraba confundido por lo que dije.
- ¿Travesura? - pregunto mi esposo.
- Lleno de nieve toda la sala de control y ahora los felinos lo están limpiando – hable cruzada de brazos – Ah, y por cierto tienes que ayudar, Lucian congelo a Zack, de nuevo.
Los poderes de Lucian son iguales a los de Jack y también tiene el poder de luz lunar que lo heredo de mí, en cuanto a Zack, es uno de los felinos que se encarga de vigilara a Lucian cuando estamos ocupados, pero casi siempre termina congelado por diversión, según dice.
- Bueno, después solucionaremos lo de tu castigo – lo mire seria – Y si ya tienes todo listo para tus lecciones de la tarde, ve a alistarte que se nos hacer tarde – asintió y se fue corriendo.
- Tarde ¿para qué? – pregunto Jack.
- Jack ¿acaso se te olvido? – estaba nervioso, no puedo creer que se le olvido – Iremos a visitar a mamá – se rasco la nuca en señal de arrepentimiento.
Fuimos a la sala de control para que ayude a eliminar la nieve y luego descongelo a Zack, al regresar a la puerta de salida, Lucian ya estaba ahí, saque mi cetro y nos pusimos el "modo humano"(Lucian tenia el cabello castaño oscuro, ojos marrones y piel mestiza) y nos teletransportamos al bosque que está cerca a mi casa para que nadie nos vea. Claro se me olvidaba, en estos años Jack y yo ya no tenemos la apariencia de jóvenes, ahora parecemos mayores como de unos 30 y eso fue gracias también a Hombre de la Luna.
- Espero que estén en casa – toque la puerta de la casa.
- ¡Hermana! – era Sophie quien nos abrió – Bienvenida – me abrazo – Hola Jack – la saludo con la mano – Oh, y el pequeño Lucian, ven aquí pequeño – Lucian la abrazo.
A Sophie al igual que a mi madre les conté la verdad y al instante recordó lo que paso ya que creía que solo fue un sueño, diría que su mejor amigo es Conejo, de ves en cuando la llevo para que lo visite, ella ahora tiene 19 años y esta en la Universidad, es una buena estudiante.
- ¡Hija! – mi madre que estaba en la sala se levantó y nos recibió con un abrazo – Que bueno que viniste.
- ¡Abuela! – Lucian se lanzo a abrazarla, la adora.
Tocaron la puerta y Sophie fue a abrir, estábamos conversando de todo lo que paso, los lugares donde estuvimos.
- Pude darme un tiempo en el trabajo para venir a visitarlos – esa voz... la persona se hiso presente en la sala – ¿Hermana? ¿Jack? – parecía incrédulo a lo que veía, pero después de unos segundos nos abrazamos.
- Hermanito, no pensé verte hoy – lo seguía abrazando.
Recuerdo que Jamei se puso celoso cuando se enteró que nos casamos y que estaba embarazada, podría decir que hasta quería matarlo, pero ya se le paso, no lo vemos muy seguido ya que desde que se consiguió trabajo en una empresa importante como Gerente de no se que area, trabaja casi todo el día y solo a veces nos cruzamos, el tiene 26 años y como su hermana mayor es un lider nato, supongo que fui su ejemplo, la diferencia seria que aun no se casa, pero si tiene un romance con una ex compañera de su universidad.
- Lose, es por el trabajo – lo mismo siempre, ya lo sabemos.
- ¡Tío Jamei! – Lucian salto y abraso a Jamei.
Todo este tiempo lo pase bien al lado de mi esposo e hijo, mis días son felices con ellos, no pido más, esto es lo que siempre he deseado, estar junto a Jack y Lucian, ahora me doy cuenta que aquel sueño que tuve a los cinco años y lo plasme en las estrellas no era mas que una vision, una vision de mi futuro, mi sueño hecho realidad y todo gracias a Hombre de la Luna, mi padre.