⊏Completa la primera parte (en edición)⊐
¿Acaso podría dejar ir a su dolor de cabeza? ¿Como dejar ir aquellos ojos color durazno?
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Para Dmitry sentir el tacto tembloroso de aquella coneja que intentaba ser fuerte, se volvía una obse...
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Welcome peachie
Omnisciente
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La mestiza bostezó al despertar después de una larga siesta, lo primero en lo que se dio cuenta era que su jaguar no estaba con ella. Se sentó en el borde de la cama y miro a su alrededor, ya se encontraba más que despierta y no podría estar tranquila hasta ver donde estaba su pareja. Un mal sabor de boca la recorrió, se negaba a creer que él había roto su promesa.
— Buen día, Majestad —. Fue recibida por sus sirvientas.
— ¿Saben que está haciendo su rey? —.
— Se levantó primero que usted, llego su hermanastra después de un largo tiempo y la recibió con sorpresa. No había avisado ella que llegaría, por lo que tuvo que bajar rápido para recibirla —.
— Mmm ya, ¿y dónde está? —. Pregunto despectiva.
— En el salón de visitas de la sala oeste, hablando desde hace unas horas con su hermanastra, pidió no ser molestado —.
Olivia se quedó algo molesta por aquello, no quería aceptar que se puso celosa por la hermanastra de su jaguar. Era algo que no debería de importarle, pero en su interior ella quería que en ese momento él estuviera ahí con ella y solo con ella. Suspiro algo irritada por el tema sin querer salir de su cama ahora, esperaría hasta que su jaguar fuera por ella.
— Reina, permítame pasar —.
— Puedes pasar —. Samanta abrió la puerta por su soberana, pero era más por ver a su pareja, ya que por algo no podía verlo mucho.
— Buen día, acaba de llegar un hombre diciendo que es su padre y no se irá hasta que usted lo reciba. Se ha quedado parado por media hora fuera del recibidor esperando por usted, no le iba a poner atención, pero se ve algo viejo y no creo que sea bueno que siga bajo el sol —.
— ¿Mi padre? —.
— Reina, ¿se siente bien, está pálida? —.
— Sí, no es nada —.
— ¿Lo saco del castillo o le digo al rey que lo atienda por usted? —.
— Yo lo atiendo, Dmitry está ocupado. Llévalo a la sala de invitados que está en el sur. Atiéndanlo mientras voy, si se siente mal llama al médico —.
Habid asintió y salió sin antes dar una reverencia a su reina. Olivia casi cayó de nuevo a la cama por aquello, llevaba años sin ver a su padre, seguía sin estar lista para recibirlos. Aún más, si estaba sola, necesitaba a su pareja para conllevar sus emociones que la querían traicionar en ese momento.
