Cap. 33: Nomi Tanaka

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Katzuki se encontraba terminando un kimono negro en la estancia. Era medio día. Tenía abierta toda la casa para que el aire circulara y el olor de las glicinias entrara. Le encantaba esa fragancia. Había tanto silencio, que los insectos del jardín se podían escuchar a la perfección. Ya estaba dando las últimas costuras. Se sentía tranquila. Pensaba en que Kenji no debería tardar ya en llegar. Tenía ya dos días en una misión, dos días en los cuales ella se había quedado sola y estaba aprovechando el tiempo cosiendo, ya que ni misiones había tenido. Escuchó unos pasos a una corta distancia y se volvió. Ahí estaba Kenji, de pie en la puerta.

-He regresado- le dijo el joven y caminó hacia ella.

-Bienvenido, Kenji- le contestó la chica sonriendo. El joven se sentó a su lado y le dio un beso en la frente.

-¿Todo bien?- le preguntó.

-Sí... aproveché para hacer esto- y le mostró el kimono- sé que tu hermana está por venir y quiero regalárselo.

-Es hermoso, Katzuki... y ya sabes que mi hermana ama tu trabajo- le contestó Kenji.

-Me halaga mucho eso- desde hacía tiempo, Katzuki había conocido a la hermana de Kenji. Era una joven muy hermosa, dos años mayor que su hermano. Ambos compartían los mismos ojos cafés y ligeramente rasgados. La chica tenía el cabello negro también, pero muy largo. Era de estatura ligeramente más baja que Katzuki. Su nombre era Nomi Tanaka y era la tsuguko de Kenji. Era muy talentosa. Las dos chicas se habían llevado muy bien y Nomi amaba las costuras hechas a mano de Katzuki, quien siempre le obsequiaba kimonos y hasta un haori le había hecho. Recordaba que, siempre que estaba de visita, le decía que Kenji y Katzuki deberían casarse, cosa que ambos negaban. No era algo que contemplaran en ese momento. Por otra parte, Kenji estaba feliz de que su amiga y su hermana fuesen tan cercanas. Nomi era igual de bondadosa que él, sólo que constantemente hacía bromas y le decía que debía casarse con Katzuki. Aunque él deseaba hacerlo, ella no. Sus planes a futuro no eran los mismos y él respetaba eso. Un cuervo entró a la estancia y se posó cerca de Kenji.

-Nomi Tanaka está aquí- anunció. Los dos chicos sonrieron y se pusieron de pié.

-Siempre llegando de improviso- dijo Kenji. Una joven muy bella, portando el uniforme de los cazadores de color azul marino, entró a la estancia y abrazó a Kenji, que correspondió al abrazo.

-¡Hermanito lindo!- le dijo- ¿Cómo estás?

-Recién llegaba de una misión. ¿Y tú?- le contestó.

-También. ¡Katzuki!- y fue a abrazarla también- ¡Qué hermosa!- ella le correspondió y le contestó:

-No más que tú.

-¿Mi hermano y tú ya se casaron?

-Mira este kimono que te hice- le contestó Katzuki mostrándole su trabajo recién terminado- recién lo terminé. ¿Te gusta?

-Pero no me has...

-Kenji, toma una ducha para que te refresques, anda- el joven sonrió y se retiró haciendo una reverencia. Sabía que ese tema no le gustaba a Katzuki.

-Oye, Katzuki- habló Nomi- ¿de verdad no quieres casarte con mi hermano?

-¿Te gustó el kimono?

-Oye... no evadas más el tema- Katzuki suspiró.

-Mira- le contestó- ya hemos hablado de eso antes.

-Pero hacen una bonita pareja...

-Nomi, te he dicho antes que...

-Ya sé que no lo amas, pero es un buen chico. Ya tienen mucho tiempo viviendo juntos y no sé como es que no te has enamorado de él. Y he visto que te besa en la frente... y que te trata muy bien. Te haría muy feliz si fueras su esposa.

Mi Luna (Kokushibo x tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora