Brandon Moere
–¿Te ha pasado algo maravilloso alguna vez? —le pregunto y ella solo ríe tras la línea.
Resulta que hablar de estos temas con ella es como algo cotidiano, para alguien como yo no son temas que trato a la vuelta de la esquina, solo vivo de mis lios en sabanas y siempre evito conversaciones largas...o evitaba.
–Entonces es hora de confesarte una de esas cosas maravillosas.
Sonrío y me reclino en mi silla.
Esperando como un niño tonto al que le confesaran un secreto.
–Nunca había estado tan ansioso por saberlo —lamo mis labios obligándome a eliminar mi sonrisa —No soy un hombre chismoso, pero no quita que me interese saber lo que estas apunto de decirme.
–Okay...tu ganas.
–Habla.
Acaricio mi barbilla mientras palpo el pequeño rastro de barba que increíblemente no me molesta tener todavía.
–Una de esas cosas maravillosas y de las que nunca me arrepentiré es el haberte conocido, Brandon —escucho como suspira. No sabía nada de ello, pero aún así no me molesta —Eres tan importante como un día completo recorriendo Venecia.
–Ya veo, es un grado de importancia sumamente alto.
–No podrías esperar menos.
–¿De ti? —pregunto con diversión en mi voz —Puedo esperar millones.
–No cuentes con que sea un precio.
Por supuesto, tenía que decirlo.
–Si yo fuera tu no despreciaria los millones.
–A ver, cuéntame.
De inmediato mi lado estratégico se activa. Cada moneda o papel suma a más, si lo desprecias por una suma alta nunca sabrás lo que es reconstruirse desde cero.
Con un Padre como el mio no hecho de menos crecer desde su costilla porque nada ha sido así, todo me lo he ganado por mi mismo.
Por lo único que debería agradecerle es por haber elegido una mujer maravillosa para ser mi Madre, luego puede irse a la mierda. Él y sus millones.
Mis billones y yo no lo necesitamos.
–Te contaría, pero no suelo ser un presumido.
–De todos modos, no te daría los millones.
–Aún así te quiero.
La línea se queda unos minutos en silencio, tal cosa me sorprende, pero no digo nada.
–Me gusta que todo sea mutuo.
No es problema para mi.
Incluso si no deseo a muchas personas ocupando mi corazón.
–Siempre haz estado dispuesta a dar, eso es suficiente para alguien como yo que prefiere reservarlo todo.
–¿Me quieres más de lo que crees? —hace esa pregunta finalmente y tan solo suspiro buscando las palabras.
Nunca he sido de hermosas palabras, pero no es un imposible cuando se trata de alguien con quien puedo ser más de lo que jamas imaginé en la vida.
¿Un hombre romántico?
Quien diría.
–Sin importar que, lo hago —no le miento. Ni me miento a mi mismo. La quiero.
–Eso es lindo.
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Queen of Daddy | +21 |
RomanceÉl ya se encuentra aburrido de tratar con mujeres que no elevan sus expectativas, quiere algo más nuevo y fresco, alguien para llenar de placer bajo sus llamadas cadenas de placer. -Serás mi nueva adquisición. -¿Serás un amo para mi? -Daddy, grabate...