Brandon
Hoy el sol parece más hermoso que nunca, apenas salió dejé que los rayos tocaran la piel de mi cara, pecho y brazos como una pequeña caricia mañanera.
Apesar de que el invernadero es un lugar bastante frío es inevitable que la temperatura no se normalice, por las mañanas es incluso más perfecto.
No pasaba a menudo por este lugar, aunque sigo teniendo la tarea de cuidar las flores no me había animado a pasar el rato aquí.
Todo eso cambió cuando alguien llegó a mi vida y la moderó locamente.
Con ella tengo un sin fin de razones para cuidar lo que tengo, lo que pienso y lo que hago.
En la espera de que se abra totalmente conmigo.
Si he escuchado un poco de lo que Ellen tiene que decirme sobre su vida, tal vez no lo suficiente para conocerle de un todo, pero después de lo que hemos pasado no tengo en mis planes presionarla con cosas que podría saber más adelante.
Incluso los secretos que pueda tener para si misma no son temas que a mi curiosidad se le haga difícil para mantenerse en la espera.
He aprendido que Ellen es una caja llena de sorpresas, para ella es incluso más fácil que su personalidad brote en el segundo en que está viviendo cosas importantes y que la hacen llenarse energía.
La he visto cuidar de las flores como si fuesen un tesoro al que no puede descuidar ni por un error, la he visto cuidar de mi y sin dudas puedo afirmar que Ellen es la indicada para lo que quiero hacer ahora.
Disfruto el sol y el olor de las flores por unos buenos minutos, el olor a tierra húmeda también me impregna la nariz.
–Hay trabajo que hacer Brandon, basta de holgazanería —me digo a mi mismo con una pequeña risa divertida.
Tarde me doy cuenta que nunca había bromeado con nadie, o conmigo...mismo. Lo que diré sonará demasiado poético y puede que sobrepase los niveles de romanticismo en un hombre dominante, en consecuencia, para alguien que solo practica la sumisión, pero creo que dentro de mi ha crecido un enorme jardín de flores.
Esa niña...
Tiene una influencia en mi que corre como si fuese un veneno mortal en mi sangre. Tan mortal que puede hacerte volar, darte tanto poder y a la vez convertirse en tu propio castigo.
¿Sigo siendo demasiado codicioso?
No quisiera creerlo, no porque este tan cegado de amor y deseo, sino porque así lo que quiero como también acabo de decidirlo.
No hay nada que me detenga, tampoco soy una pieza cómoda.
Tengo planes que no quiero dejar en corto.
Tomo el Lirio amarillo que corté hace unos momentos mientras imaginaba su cara la verlo, al recordar las palabras que conllevan su color.
"Felicidad en el amor, gratitud y alegría"
Ella se merece esto y mucho más de mi, se que puedo dar tanto como para llenarla por completo.
Llevo la flor a mi nariz queriendo inhalar su propia esencia. Su olor es tan atrayente que tengo en cuenta que ni siquiera ella podrá resistirse.
¿Le gustará tanto como para besarme?
Lo mas interesante está en descubrir como será su reacción y vivirla con el fin del disfrute.
Espero que ese sea el resultado.
Con una mano dentro del bolsillo y la otra aún con la flor en mi nariz olfateandola de vez en cuando, me siento lo suficientemente listo como para deslumbrar a la hermosa Diosa que espera enredada en mis sabanas.
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Queen of Daddy | +21 |
RomanceÉl ya se encuentra aburrido de tratar con mujeres que no elevan sus expectativas, quiere algo más nuevo y fresco, alguien para llenar de placer bajo sus llamadas cadenas de placer. -Serás mi nueva adquisición. -¿Serás un amo para mi? -Daddy, grabate...