Queen of Daddy | +21 |

Capitulo 10: parte II

Un Brandon de veintiún años...

Brandon

Un día tan apretado de trabajo como este en el que no quiero tener interrupciones me veo obligado a tener que ir al aeropuerto por Lena, normalmente le encargo este tipo de asuntos a uno de mis chóferes, pero la testaruda pidió específicamente que fuera yo quien la recibiera apenas aterrizara su avión.

Como si no tuviera miles de cosas que hacer que si importan en todo el día.

Uno de los mayores conflictos que tengo es que odio esperar a las personas como si fuese un idiota ansioso y desesperado, los puedo recibir en mi casa cómodamente sin problema alguno. Eso no me haría el peor de los hombres o el menos caballeroso.

Lena me conoce lo suficiente para confirmar que lo que digo no es solo un tonto reclamo, estoy tratando de ser lo menos antipático posible.

Con un poco de ayuda.

Cierto.

Estoy recostado de mi auto mientras espero a que el avión privado abra sus puertas luego de aterrizar, a Lena le gusta tardarse todo lo que puede con tal de hacerme sentir frustrado hasta que ya no me quede paciencia. Esa siempre ha sido una de sus estrategias conmigo simplemente porque lo disfruta, aunque se haga llamar mi mejor amiga y única hermana.

Una fuerte brisa me azota de repente como si se tratara de un golpe de calma.

Cierro mis ojos y respiro profundo.

Tendré que dejarla en casa de mi Padre hasta que mi Mansión esté completamente lista debido a las nuevas modificaciones que he decidido hacerle:

1. El nuevo sótano de placer.
2. El invernadero de mi abuela.
3. Las habitaciones del tercer piso, destinadas para las personas de gran importancia para mi.
4. La enorme biblioteca.
5. La terraza...

Y una serie de cosas más que necesita un hombre soltero que ha decidido irse de casa de sus Padres hace tiempo y tiene todo el poder para acomodarla a sus gustos, comodidades e incluso las perversidades más grandes que ha de tener.

Lena quería tener el privilegio de ser la primera en ver como avanza todo, solo que se lo he prohibido al menos por hoy a que no haya tantos desordenes o puntos peligrosos que no han sido reparados.

Les he prohibido estrictamente a los trabajadores que no tocaran las flores del invernadero a menos que fuera necesario mover algunas para no maltratarlas o pudiera interrumpir el éxito de la construcción.

Fue todo un dilema.

Puede que me haya estresado un poco en el momento de dar las indicaciones.

El recuerdo me hace contraer un poco mi rostro con una expresión amarga.

Ahora mi asunto es Lena...

Finalmente se abre la puerta del avión, el piloto es quien aparece en mi visión periférica regalándome un saludo de cortesía antes de que la persona a la que espero aparezca detrás de él dándole una mirada un tanto peculiar que deja en claro que algo sucedió ahí dentro.

Apostaría a que el piloto tuvo que cortar una hora de sus obligaciones para atender a mi mejor amiga, la cara la tiene tan roja, toda ella luce extasiada y tan fresca como una lechuga.

Tendré que conversar seriamente con ella mas tarde, apenas y tengamos un pequeño tiempo libre entre nosotros dos.

La veo acercarse a mí caminando con toda la elegancia que pueda desprender una mujer, en cuanto al piloto, la sigue detrás con las maletas en ambas de sus manos sin dejar de verla.