Ocho meses después...
— Por fin saldrá hoy del hospital — dijo Arashi sentado en la alfombra enmedio de la habitación intentando entender las hojas en sus manos.— Sí, solo necesitaban hacerle algunas pruebas más, pero dijeron que estaba perfecto y saludable — contesto Itzuki quitándole las hojas, analizandolas.
— Era claro que estaba bien, no hacian falta tantas pruebas — dijo sonriendo ante el ceño fruncido del Omega que tampoco lograba descifrar el contenido.
— Lo sé — dijo con un suspiro pesado — pero sabes cómo es papá, no quiso dejar nada sin analizar, sabes lo sobreprotector que es, además mamá también lo apoyó y contra ese par nadie puede — dijo con una carcajada que dejó un eco en el ambiente y el corazón del Alfa.
— Bueno, todos nos preocupamos cuando tío Izu se debilitó y dijo que no podía usar su quirk como siempre, eso definitivamente nos asustó, pero Katsuma dijo que era un tanto normal y tío Kats no escatimo gastos para que se hiciera hasta el último estudio y asegurarse de que estaban bien — recordó frunciendo levemente el ceño — ¡Pero todo salió bien, no hubo ningún problema más! — sonrió alborotando el cabello cenizo, llamando la atención del Omega que se habia puesto serio derrepente.
— Fue complicado, pero todo está bien, mamá está perfecta y papá no puede estar más feliz, creo que incluso lo ama más que a mi — dijo con un puchero, inflando las mejillas mirando a un lado.
— Eso es imposible Itzu, lo sabes, a pesar de estar angustiado y preocupado, tío Kats estuvo todo el tiempo contigo, jamás te dejo solo, no debes sentirte así, te ama como a nadie — lo consoló acariciando sus mejillas y tallando su entrecejo para que lo relajara.
— Si... Supongo que si — balbuceó sonriendo ante los jugueteos del Alfa — aún así creo que tendré que ser más adorable que antes, ese tonto Kyo no va a quitarme el puesto de hijo favorito — medio gruño dejando las hojas a un lado y tomando el desarmador, comenzando a unir dos piezas de la cuna que aún no tenía el aspecto de una.
— Si... creo que eso va a ser imposible — afirmó el Alfa acercándose y tomando sus manos haciendo que dejara lo que hacía — no hay forma de que seas más adorable — susurró cerca de sus labios y los unió en un beso suave, dejándose llevar por el dulce comportamiento de su Omega, que aunque trataba de mostrarse molesto, sabía que estaba tanto o más feliz por la llegada de su pequeño hermanito.
Itzuki se olvidó de lo que hacía y se acercó más al rubio, levantándose y quedando de rodillas con las manos recargadas en el ancho pecho mientras lo besaba cada vez más demandante.
En cuanto Arashi llevo las manos a su cintura, aferrandose a ella tratando de atraerlo, el cenizo se detuvo de golpe.
— Espera, tus hermanas — dijo volteando hacia la puerta rápidamente, sabía que las gemelas estaba en algún lugar vigilandolos y esperando cualquier movimiento en falso para comunicárselo a los adultos, y aunque las amaba, ese par eran su mayor temor y máximo dolor de cabeza.
— ¿Y si te dijera que al fin encontré algo para sobornarlas y regresarán en media hora? -?— susurró el Alfa levantandose y jalando a Itzu de la mano, poniéndolo de pie también.
— Preguntaría por que mierda no lo dijiste hace diez minutos — ronroneó mirandolo con los ojos brillantes y sin decir nada más se lanzo a sus brazos aferrandose al cuello y enredando las piernas en la cadera del Alfa que lo recibió feliz sosteniendolo con firmeza, devorando los carnosos labios con desesperación.
Con paso tambaleante Arashi saio de la habitación color pastel dónde estaban, dirigiendose a la contigua, abriéndola de una patada y dejándose caer sobre la suave cama de Itzuki sin dejar de besarlo.
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DOMINANTE
FanfictionAlfas, Omegas, Betas... Y entre ellos los conocidos como Dominantes. ¿Que hacer cuando un suceso doloroso te arrastra a tu felicidad y destino? ¿Como confiar? ¿Como decidir? *Katsudeku *18+ *Universo con Kirks La portada en mi diseño, las imágenes...