Favorite Crime (BoyXBoy)

Capítulo 47

Lían

Aquel día 19 de octubre habían pasado muchas cosas, tanto malas como buenas. En el trayecto del vieje de regreso a casa, Alec me había confesado el cumpleaños de su madre, sorprendente fue el enterarme que fallecio 5 dias despues. 

Si, su cumpleaños fue el 14 de octubre .

Una vez mi madre me conto sobre este dato algo ¿raro? Que me dijo mucho tiempo atrás "Hay más probabilidad de que mueras el mismo mes de tu cumpleaños que el día exacto" nunca lo creí posible, hasta ahora. El solo pensar en aquella posibilidad me dejaba un amargo sabor en la boca, uno mucho más agrio que el limón.

Llegando hace más de 3 horas, habíamos llegado super tarde, exacamente a las  2:48 de la madrugada. Como siempre era de esperarse,  Alec se aseguró de revisar que todas las puertas se encontraran cerradas, evitando posibles robos o que algún desconocido se metiera a matarnos. Adentrandose en su habitacion pocos minutos despues sin decir nada.

Comprendía lo que estaba pasando en su cabeza, perder a un ser querido no es bonito ni fácil de procesar, menos cuando es uno de tus padres quienes siempre los veiamos inmortales, por que el solo imaginarnos una escena asi, es algo muy desgarrador. 

Una hora después decidí entrar a su habitación, en mi mente aún seguía el recuerdo o el presentimiento de que algo había arriba y no era precisamente un hermoso animal. En esa hora había aprovechado para comer, pues mi panza rugía de hambre al no haber comido durante alrededor de 17 horas. Si, no había comido para nada. Nos habíamos levantado temprano como a las 7:00 de la mañana para salir de aquí a las 8:00. El trayecto duro alrededor de 2 horas, en eso Alec había comprado unas galletas y jugo mientras llegáramos. Y el resto paso y nunca tuvimos la oportunidad de comer nuevamente.

Alec no había comido para nada y eso me preocupaba.

No quería ponerlo de mal humor, así que pase de largo y me acosté junto a él, esperando que a la mañana siguiente todo estuviera mucho mejor.

(...)

Como instinto mis ojos se abren por sí solo dejando que los rayos del sol me segaran por un momento. Me siento en la cama y me froto los ojos para salir del cuarto e ir a la cocina por un vaso de leche fría. Me quede sentado procesando el sabor de la leche en mi boca, sintiendo el fresco frio de la mañana chocar contra mi piel.

Ya más relajado vuelvo a la habitación quedándome parado aun lado de la cama, observando como Alec estaba totalmente envuelto con la sabana, impidiendo que pudiera verle tan siquiera el rostro.

- ¿Quieres que te prepare algo para comer? – apresure a decirle recordando que no había comido nada el día anterior, sujetando un dedo de su pie moviéndolo suavemente.

Esperé por unos 10 segundos sin obtener respuesta alguna, le volví a preguntar esta vez agarrándolo completamente del pie y moviéndolo un poco más fuerte.

- ¿No piensas comer otra vez? – pero nuevamente no hubo respuesta.

Desesperado tomo la manta y lo destapo de un solo jalón. Me sorprendió verlo en forma fetal y con los brazos abrazondo sus piernas, como si tuviera frio.

-Oye ¿Qué tienes? - le pregunto sentándome a un lado de él, tomándolo de hombro para virarlo y observar cómo tenía un leve sonrojo en sus mejillas junto con una nariz roja. Poniendo mi mano sobre su frente sintiéndolo caliente.

-Tu frente está muy caliente – le susurre obteniendo un quejido por parte de él, por suerte Alec trajo de su departamento la caja que tenía todo, por si resultaba herido de alguna de sus tantas cosas suicidas que hace.