Camino a la felicidad (En corrección)

Capítulo 25.

Alex Cortes.

¿Qué hace ella aquí?

¿Por qué después de tanto tiempo tiene que regresar?

Es un descaro muy grande que este aquí frente a mi después de todo lo que hizo.

Tomo mi celular y le escribo Sofía diciéndole que me voy a tardar un poco en pasarla a buscar, le dije que todo está bien y que le voy a contar cuando la lleve al lugar donde le tengo la sorpresa.

Me bajo de la moto y camino hacia donde está ella.

—¿Qué haces aquí? —zanjo con frialdad, tanto que me sorprende porque después de tanto tiempo de no serlo es extraño.

—Yo también te extrañe Alex, nunca había recibido un saludo tan afectuoso de tú parte después de tanto tiempo sin vernos —ironiza.

En este momento, siento cosas, pero no el tipo de cosas de cuando alguien te gusta, tengo un sentimiento de asco, mucho asco y solo quiero que diga lo que tenga que decir y se largue.

—Puedo creer cualquier cosa, pero eso de que me extrañaste, jamás te lo creería Jazmín —le dedicó una sonrisa forzosa—. ¿Qué es lo que buscas? o mejor dicho ¿Qué quieres? Porque no creo que de la noche a la mañana vas a decir —suelto una pequeña carcajada—. ¡Oh! Tengo mucho tiempo sin saber de Alex, que tal si voy como si no le hubiera hecho algo malo para tomarme un cafecito con él —digo en un tono burlón, mientras muevo mis manos.

—¡Oh Alex! Venga, no seas así de rencoroso, en el fondo sabes que no te hice nada malo —murmura en un tono dulce y coloca su mano en mi hombro. Yo la quito con brusquedad.

¡Joder! Es una descarada.

¿Te vienes dando cuenta de eso ahora? Eso lo se desde el momento en que me puso los cuernos en mi ¡maldita cara!

¡Desahogate! ¡Desahogate!

—¿Qué no me hiciste nada malo? ¡Joder! —niego, mientras me empiezo a reír con ironía—. Te recuerdo Jazmín que me pusiste los cuernos con mi mejor amigo, aquel que dijo que yo era "su hermano" —hago comillas con mis dedos—. Puras mentiras, todo una mierda y aún así tuviste el descaro de estar conmigo mientras estabas con él a escondidas pensando que yo jamás me iba a enterar y así dices que no me hiciste algo malo, ¡Mentirosa!

Jazmín se queda en silencio por unos minutos y alza la mirada haciendo contacto visual conmigo mientras juguetea con sus dedos.

—Alex, nunca quise hacerte daño, yo te amo, perdoname ¿Si?

Wtf, ¿Me ama? Ay por favor —puedo oir las risas burlonas en mi mente—  querida Jazmín si de verdad me amarás nunca fueses hecho eso, además no deberías amarme, se supone que estás con Juliancito, no deberías decirme estas cosas.

Paso mis manos por el cabello y las meto en mis bolsillos, me siento demasiado irritado.

—Si tú me fueras "amado" —vuelvo a hacer comillas con mis dedos—, no me habrías fallado y habiendo tantas personas en el maldito planeta tierra te enredaste con Julián, ¡Bravo Jazmín! —aplaudo con ironía—. No deberías estar aquí, si Juliancito se entera se puede enojar y creo que no te conviene que tú minita de oro se enoje.

Esta potente todo esto.

Y trato de no decirle ninguna palabra ofensiva, solo por la pizca de respeto que le tengo.

Te admiro.

Jazmín frunce su ceño ante mis palabras.

—No hay necesidad de que seas grosero conmigo Alex, me ofendes.