S E C R E T O S |Fanfic Pecados Placenteros|

3

—¡Buenos días!

Josephine entró al estudio de su hermano con una gran sonrisa, Christopher estaba hablando por celular, en cuanto la vio terminó la llamada. Jossi corrió hasta él para abrazarlo siendo alzada por sus brazos.

—¿Dormiste bien? —Preguntó el hombre dando un beso en su mejilla.

—Sí, me gusta mucho mi habitación. —Sonrió— Parece el de una princesa.

—Lo eres. —La bajó y le tomó la mano para que lo siguiera fuera del estudio, en la sala se encontraba un hombre alto que ella no conocía, se pegó a su hermano— Matt será tu escolta, te llevará a donde quieras y cuidará de ti mientras estoy en la central.

Josephine dio un paso al frente mirando atentamente a Matt.

—¿Me llevarás donde yo quiera cuando yo quiera? —Preguntó— ¿Incluso si pido un helado a las seis de la mañana?

—Eeh... —El escolta miró al Coronel.

—Tampoco exageres. —Le jaló un poco un mechón de cabello, haciéndola reír.

—De acuerdo. —Le dio la mano a Matt en modo de saludo— Soy Josephine.

—Matt, señorita Morgan.

—Sólo dime Josephine. —El Coronel le hizo una seña para que saliera, lo hizo. Se volteó hasta su hermano— ¿Entonces debes ir a la central?

—Sólo por medio día, regresaré para ir a almorzar y arreglar todo para que inicies en la academia.

La niña asintió feliz.

—Está bien. —Sonrió— Mientras estás trabajando... ¿puedo salir de compras?

—¿Necesitas algo?

—No, pero si veo un vestido bonito si lo necesitaré.

Christopher río antes que decirle que sí, pasándole una tarjeta de crédito.

—¿Tengo un límite? —Dijo con duda.

—Ninguno.

Jossi chilló dándome un abrazo y un beso en la mejilla antes de subir rápido a arreglarse y decirle a su nana que saldrían. Mientras lo hacía, Christopher se encargó de repetirle a Matt todo lo que ya le había dicho anteriormente, nunca perder de vista a la niña y si pasa algo llamarlo de inmediato.

El escolta llevó a Josephine y a su nana a diferentes tiendas donde se compró ropa para estar en Londres, hacia un poco de frío y no tenía ropa para abrigarse.

Ella hizo lo que su tío Recce le había dicho, gastar todo lo que podía con la tarjeta de su hermano.

—Bueno nana, creo que ya es suficiente. —dijo ella tanto saltitos.

—¿Tú crees? —contestó ella viendo la cantidad de bolsas que llevaban— Cariño, no creo que a tu hermano le guste que hayas gastado tanto.

—Christopher dijo que no tenía límites, y no los tuve. Compré todo lo que me gustó.

Si por lo menos usaras la mitad de las cosas que tienes... Pensó Sandra.

Matt recibió un mensaje de su jefe diciendo que iría al Penthouse, así que las llevó a ambas. La niña no dejaba de hablar en ningún momento mientras comía un helado que le habían comprado.

Al llegar a la casa y subir se dieron cuenta que el Coronel todavía no llegaba. Jossi fue a la sala para esperarlo para comer, pero de quedó quieta y soltó la bolsa que traía haciendo que cayera al suelo.