Dejame Quedarme A Tú Lado (Langaxreki)

Capítulo 42: Final.

Los días en el calendario fueron pasando uno por uno. Langa descanso durante todos esos días, tal como Tadashi le había ordenado y los disfruto en compañia del pelirrojo, la compañia del otro les brindaba una gran paz y calidez inexplicable. Se miraron con amor y unieron sus labios como hicieron tantas veces atrás.

-Mañana es la carrera- Dijo Reki acomodandose en el regaso de Langa con algo de tristeza- Prometeme que no vas a salir lastimado- le imploró en un susurro mientras ocultaba su rostro.

-Todo estará bien, lo prometo- respondió el peliazul dándole un cálido beso en la frente al pelirrojo.

Compartieron unos minutos más, hasta que la hora en la que el peliazul debía irse llegó. Reki lo observó desde la puerta hasta que la silueta del otro se hacía cada vez menos divisible.

-¿Por que sigues preocupado? - preguntó una voz detrás de él- ¿Acaso olvidaste quién le enseño a andar en skate a Langa?

-Koyomi- Dijo Reki un poco asombrado por ver a su hermana.

-Vamos adentró, mañana todo saldrá bien- le aseguró su hermana con una sonrisa, dándole un poco más de tranquilidad a su hermano.

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- ¿Y? ¿Por que razón querias verme a estas horas? - Preguntó Tadashi un poco confundido y desconfiado a la silueta de un peliazul.

-Necesito hablar de algo contigo- Respondió.
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-Sólo quedan unas horas para la carrera de Langa- habló Reki mirando el reloj que se encontraba en el restaurante de Joe.

-No deberias estar tan ansioso- Exclamó Cherry mientras alimentaba a Kaori- Carla explicale.

-Si, master- Respondió el Skate digital- Le explicó, joven Reki: En esta etapa, el bebé recibe señales químicas a través de la placenta, las cuales incluyen el estado mental de su mamá. Las hormonas que las madres producen mientras van experimentando emociones pasan a través de la placenta. Así, si la mamá está severamente triste o deprimida en el embarazo, el bebé lo siente.

-¡Woaaah! - grito mirando su vientre- ¡lo siento mucho Hikaru! ¡Me mantendré alegre lo prometo!

-Primero calmate- Dijo Miya mientras presenciaba la pequeña crisis del pelirrojo.

Los minutos siguieron avanzando, hasta casi convertirse en la hora que comenzaría la carrera. Todos se dispusieron a irse antes, para lograr ver al peliazul (que durante todo ése tiempo se mantuvo entrenando) antes de la carrera y tener un buen lugar para presenciarla. Salieron del restaurante y algo que no esperaban sucedió.

-Cherry... - Habló Reki temblando y con sus ojos llorosos sin moverse del lugar. El pelirosa se volteo ante el llamado y se encontró al menor sosteniendo su vientre - Es Hikaru... - Exclamó asustado y el mayor lo entendió enseguida.

-¡Shadow, enciende el auto! - ordenó Cherry mientras le ayudaba al pelirrojo para poder llevarlo al auto- Ustedes dos, vayan a ver a Langa y más les vale cuidar de mis bebés o ¡los mataré si algo les pasa! - grito para Joe y Miya.

-¿No van a decirle? - preguntó Joe.

-Langa tiene que ganar la carrera para que pueda estar tranquilo con nuestro solecito- Respondió Shadow.