MINISTRO MORGAN [FANFIC PP ALEX MORGAN Y LAILA LINCORP]

CAPÍTULO VEINTIDOS

Laila Lincorp

Enloquecido...

Esa es la única palabra con la que podría definir la situación en la que se encuentra actualmente.

No seré hipócrita y diré que no me duele lo mucho que se preocupa aun por su ex esposa porque lo hace.

Sin embargo eso no puede nublar mi juicio ahora.

La Bratva es la mafia mas temida por algo sin embargo, Ilenko Romanov es conocido no solo por ser el cabecilla de la Bratva, si no por ser uno de los criminales mas sanguinarios y despiadado del mundo.

Mis manos sudan mientras me mantengo junto a Patrick y Dereck observando y tratando de rastrar la ubicación de Sara y Marrie Lancaster.

—La ultima ubicación sigue siendo Gales, aparentemente no podemos acceder a nada porque ni sara ni Marie tienen un chip como todos nosotros—asiento mirando a Patrick y me levanto.

—iré a comunicarle esto a los demás, debemos seguir intentando, Bratt ya fue a avisarle a Gemma—paso mi mano por mi cara, mi mejilla aun duele.

Jamás me clasifique como una persona agresiva pero en definitiva que cuando iba a comunicarle esto a Gema ella y Liz me recibieran con gritos y esta última con un a bófeta simplemente me saco de mi, claro que le devolví la cachetada a Liz pero el enojo sigue ahí.

Porque claro como ahora todos saben lo de Rach y el coronel ahora ella es la pobre victima y todos debemos soportar su mal humor.

Entro a la oficina donde están reunidos la mayoría y suspiro sintiendo la maldita tensión.

—Busquen la manera de que Danna confiese—ordena Alex—Por mi parte me iré con la tropa de búsqueda.

Por supuesto que lo ara...

Me trago lo amargo de la situación y avanzó a la habitación me acerco a Bratt y le informo la situación sin mirar a Alex.

—Bratt y Parker quedan a cargo—ordena Gauna antes de irse.

—Ok, sabemos que esto es grave —habla Parker—Pero tenemos otra misión en proceso y necesito que nos dividamos entre los que mantendrán el operativo en el centro y en los que se quedaran colaborando con la búsqueda.

—Yo me encargo del centro—espeta Bratt, hay que no me lleve con el porfavor, lo último que necesito es un anciano manoseando me—Brenda, Rachel y Alexandra vienen conmigo mientras tú te encargas de darle apoyo al ministro.

Gema se encuentra en la habitación sollozando sin embargo no habla solo mira con incredulidad a Parker y Bratt cómo si pretendiera que todos nos enfoquemos solo en su madre.

La entiendo si fuera mi madre... Ni siquiera puedo imaginarlo.

-—Tenemos que culminar esto lo antes posible porque si esto se alarga necesitaremos que todos los soldados estén aquí.

—Alan y Scott harán parte del equipo de búsqueda — ordena Bratt.

—Stefan esta casi del todo recuperado y puede dar con el paradero de Drew y Maricarmen...—sugiere Rachel

—¿Segura?

—Esta mañana estuvo probando con una sola muleta y fuimos al hospital, está casi recuperado, puedo llamarle si quieren—miro a Bratt y Parker antes de que la mirada de Christopher y Alex se clave en mi uno más molesto que otro.

—Si solo va a ser una carga no lo quiero cerca—miro a Alex sorprendida y asiento mirando a él y después a los capitanes.

—Estoy segura que puede ayudar—Parker asiente y mira a Allan detrás de mi.

—Que Paul valla por el—habla del centro y después regresamos a lo mismo.

No dormimos más de una o dos horas en toda la noche pero no obtenemos ningún avance, son las siente y mi celular vibra.

Contesto algo tensa por todo el estrés y mi corazón la te cuando escucho a Alex.

—en mi oficina ahora —cuelga y miro a Dereck a mi lado.

—Ahora vengo, ¿Podrías seguir intentando en el territorio cerca de Londres? —asiente y sigo diciendo que su cara me suena.

Y sigo preguntándome de dónde demonios conoce a la novicia que no es novicia.

Salgo y voy a la oficina de Alex, la central está en movimiento la mayoría afuera en tropas de búsqueda.

Entro a la oficina y veo a Alex frente al pequeño bar tomando lo que parece whisky.

—¿Cómo te sientes? ¿Puedo hacer algo?—se viene contra mi besándome y toma mis mejillas cuando me pega a la a puerta.

—No hables, solo no hables ahora—esta herido, está... Ni siquiera se que palabra utilizar.

—Alex

—Por favor Laila solo guarda silencio un minuto—gruñe pegándome a él.

No es sexo, no eso lo que esta buscando...

Me abraza con fuerza como si buscara un poco de tranquilidad tal vez.

Ni siquiera lo se. 

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nos vemos mañana cielitos.

bye besos