Laila Lincorp
Arrastro mi cuerpo por la tierra del barranco cuesta arriba.
Tengo que salir de aquí, tengo que salir de aquí y decirle a todos lo que esta pasando con Rachel y Angela.
Eso es todo lo que recuerdo hasta ahora.
Mis ojos se abren y parpadeo tratando de adaptarme a la luz blanca centellante.
Abro la boca pero la cierro sintiendo la garganta seca y adolorida, ¿Dónde estoy?
El hipnosis, Rachel, Angela, el barranco... estoy viva...
Miro a mi alrededor tratando de ubicarme y suspiro, estoy en el hospital, si eso es seguro.
Necesito agua, carraspeo pero lo único que sale es un gemido extraño que hace aparecer a una enfermera frente a mi.
—Teniente despertó—teniente... estoy en el hospital militar eso debe ser, asiento hacia la enfermera y trato de enderezarme.
—Agua... por favor —susurro y asiente acercándome un vaso de agua con un popote.
Bebo y agradezco sintiendo mi garganta relajarse un poco y me ayuda a sentarme.
—¿Cuánto tiempo llevo aquí?— me mira y sonríe con dulzura.
—Lleva aquí un día y medio teniente, pero tiene siete días hospitalizada —paso saliva pasando un trago amargo.
Siete días...
—Yo necesito hablar con el coronel Morgan, y con el ministro —me siento moviéndome y tratando de acomodarme y me toma del hombro negando.
—Teniente necesita calmarse
—Lo que necesito es hablar con...—mi conversación se ve interrumpida por la puerta que se abre mostrándome a un Alex Morgan con barba descuidada de algunos días, traje gris con algunas arugas haciéndome pasar saliva.
La enfermera lo ve y se aleja un paso mirando a Alex que asiente y sale.
—Nos descubrieron, ellos... Meredith delato a Rachel, ellos la drogaron y Angela...—soy fuerte, jamás he carecido de profesionalidad pero esto es otro nivel, mi voz se rompe y tomo aire—Ella... ellas necesitan nuestra ayuda, tenemos que ir por ella.
En dos zancadas grandes me toma de las mejillas pegándome a su boca.
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MINISTRO MORGAN [FANFIC PP ALEX MORGAN Y LAILA LINCORP]
FanfictionLaila Lincorp, teniente de la FEMF, una mujer despampanante y de rasgos latinos que al conocer la me llamo la atención. Era una tentación tan palpable que no pude resistirme más a ella y actúe. Cuando lo hice no planeaba que derrumbaría los muros qu...