CAPÍTULO CINCUENTA Y CINCO

2.3K 151 17
                                    






Laila Lincorp 





Camino detrás del ministro hasta llegar a su oficina después de que hiciera una ridícula escena afuera de Stefan y yo.


Llegamos y lo veo en cuanto la puerta se cierra nuestras espaldas.


—¿desde cuanto tu cotilleo con Gelcem es mas importante que el trabajo Laila?—lo miro y suspiro.


—No estábamos cotilleando y si fueses así, jamos me he distraído de mi trabajo señor—me mira como mira a casi todos los que lo desafían, como si quisiera destruirme.


El no lo sabe quizás, pero ya lo hizo, hizo papilla con mi corazón, solo para arreglarlo de nuevo antes de volverlo polvo.


Llevo semanas tratando de reconstruirme para que el siga creyendo que puede venir y hablarme así.


La estúpida parte enamorada como adolescente de él dice que me arroje a sus brazos, que quizás esta celoso, pero no la razonable me dice que solo dejo de llorar por él.


Suspiro sintiendo como mi corazón se acelera tan solo con el aroma de su loción, paso saliva ignorando las reacciones de mi cuerpo.


Ni siquiera se que dice a Alex cuando vuelvo a enfocarme en él.


—¿entonces?¿que ocurre entre tu y Gelcem? —lo miro con el ceo fruncido y suspiro.


El me dejo no le debo ni una jodida explicación de mi vida privada.


—Si lo hubiera o no, no es asunto suyo ministro, esta conversación no es en absoluto profesional, me retiro —respondo tajante y me giro sin embargo rodea mi brazo girándome—Basta


—No hasta que me digas que demonios ocurre contigo y ese idiota —lo miro achinando los ojos y me jalo para salir de su agarre.


—Basta Alex suéltame, no puedes decirme con quien estar o no, tu lo terminaste, dejamos todo claro ahora si no tienes nada que decirme sobre el trabajo me iré


—No me digas que el imbécil pobreton logro meterse a tus brag...—mi mano se levanta con impulso y golpeo su mejilla alejándome un paso de el.


—No vuelvas a tratar de hacerme ver a mi como la mala, no tienes el puto derecho para pedirme explicaciones Alex, no las tienes, porque eres un puto cobarde—creí haber superado la etapa de la ira, pero tal vez no lo hice.


—¿cobarde?—habla mientras su mano cae de su mejilla ahora roja.


MINISTRO MORGAN [FANFIC PP ALEX MORGAN Y LAILA LINCORP]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora