Laila Lincorp
—Esta bien, vamos a olvidarlo —lo abrazo y suspiró antes de soltarlo y tomar una porción de trata de fresas que hizo el soldado chef.
—Yo en verdad debo pedirte una disculpa—suspiro y lo miro.
Llevamos toda la mañana con esta conversación, tomo si mano y la aprieto negando.
—Stef, de verdad el tema ya está olvidó así que deja el drama y apresúrate con eso que Bratt nos espera en la central
—¿Cómo está el capitán?— suspiro sonriendo a medias.
Stefan no le sentó bien el compromiso de Rachel con Christopher y a Bratt bueno... Mucho menos.
Suspiro pasando las manos por mis muslos mirándolo.
—El estará bien, tiene a Meredith y a diferencia de ti que sonara cruel pero Rachel le cortó las alas como tal a Bratt, el decidido no superarla, así que no hagas lo mismo, podemos salir de fiesta y puedo presentarte a alguna amiga —le guiño un ojo.
Niega riendo y después de desayunar salimos a la central, le pasó las llaves de mi auto y suspiro.
—Puedes llevártelo, yo me quedaré a dormir en el comandó, mañana me toca entrenar a los novatos a las cinco —asiente y me giro para caminar a mi edificio.
Me toma de la muñeca y lo miro.
—en verdad lo siento Laila no quiero que sea incómodo o...—suspiro mirándolo y niego poniendo mi mano en su hombro.
Stefan me lleva unos diez centímetros no es mucho pero aún así debo elevar la mano.
—Stefan, de verdad es tema olvidado, no es incómodo pero tú lo estás haciendo así, pero si te hace sentir mejor te daré mi perdón a cambio de uno de tus pasteles se chocolate con fresas y cerezas tres leches —el asiente aturdido pensándolo y asiente riendo.
—Trato hecho —sonrió y palmeo su hombro
—Bien me voy, Bratt te quiere ver en su oficina yo iré con la tropa —me despido y avanzó al edificio de dormitorios, cuando entro veo que Rachel a sacado sus cosas así que deduzco que su prometido lo solucionó ya.
ESTÁS LEYENDO
MINISTRO MORGAN [FANFIC PP ALEX MORGAN Y LAILA LINCORP]
FanfictionLaila Lincorp, teniente de la FEMF, una mujer despampanante y de rasgos latinos que al conocer la me llamo la atención. Era una tentación tan palpable que no pude resistirme más a ella y actúe. Cuando lo hice no planeaba que derrumbaría los muros qu...