Capítulo 40 - Nuevo Mundo.

24 2 9
                                    

Al despertar al otro día noté que no estaba en mi habitación y me alarmé al no reconocerla. Giré hacia un lado para verificar si estaba sola y definitivamente la cama estana totalmente vacía hasta que de repente observé una foto a un lado de esta, junto a la cama había una mesa de luz con un velador y junto a ella una foto de Gemma y Harry, fue entonces que todos los recuerdos de anoche me cayeron como balde de agua fría.

-Mierda. -Rapidamente me puse de pie y comencé a buscar mi ropa, como pude me la coloqué y salí corriendo hacía mí habitación.

Agradecí entonces que mis hermanas no estaban aún en ella asi que sin pensarlo, me metí en el baño a darme una buena ducha mientras pensaba en todo lo que había sucedido por pasos. Yo en el pasillo intentando llamar a mis hermanas por culpa de las ampollas, Harry apareciendo y notando mi estado, su habitación, las palabras, el besándome, el preguntando si podía avanzar, yo accediendo sin miedo, los te amo...

Mi corazón va a estallar por no saber como reaccionar a esto.

Una vez que termino de cambiarme, decido enfrentar todo y bajar hasta el living pero este esta vacío hasta que escucho risas provinientes del comedor. Comienzo a caminar hasta esta mientras no puedo evitar sentirme feliz y emocionada, de tan solo recordar a Harry diciendome esas palabras me alegraba el día.

Es entonces que cuando entro segura y completamente a la sala, una pequeña sonrisa me asalta mientras obvservo a todos lados buscándolo con la mirada. Y allí lo veo, a su lado Gemma y del otro una chica que no conocía para nada, ambos ríen divertidos y mi sonrisa se borra de inmediato porque el encanto se rompe y vuelvo otra vez a sentirme usada, si es que esa es la palabra.

Me senté sin hacer mucho escándalo junto a mis hermanas. Bajo mi mirada porque no quiero mirar dónde el esta, no puedo porque no conocía a la chica pero tampoco podía controlar mis sentimientos, esto es lo que el provocaba en mí y esta era la parte mala que odio ser. Una maldita celosa.

-¡Karen! Al fin apareces, mira... -Mi hermana menor me muestra algunas fotos en su teléfono para subir a su instagram y lo único en lo que estoy pensando es en la sensación de estar siendo obvservada todo el tiempo.

-Este y este. -Digo señalando las que mas mas gustan. Veo como una mujer que no es Sarah pero al parecer ocupa su lugar aquí, me sirve un poco de te. Levanto mi cabeza regalándole la mejor sonrisa que puedo para agradecerle. -Muchas gracias. -Ella no responde y yo bajo mi mirada directa al te.

-¡Hola! Tu debes ser Karen ¿Verdad? -Oigo una voz no reconocible y muy a mi pesar levanto la cabeza y clavo mis ojos en la chica nueva por primera vez.

-Asi es. -Respondo sin mucho entusiasmo.

-Hola. -Escucho la voz de Harry y podría decir que no remueve nada en mi pero siento como si mí corazón saltara dentro de mi pecho aunque en mi cara no lo reflejara, sin embargo le doy una mirada desinteresada.

-Mi nombre es Margaret, Maggie para los amigos. -Dice y asiento.

-Karen ¿Donde dormiste anoche? -Pregunta Irina mirándome. Giro mi cabeza y trago duro. -Creimos que te habían secuestrado pero aqui estás.

-Secuestrada por vampiros. -Dice Melanie y ríen divertidamente. Arrugo mis cejas sin entender.

-¿Por que? -Pregunto.

-Pues tu cuello parece decir eso, ahora solo hay que encontrar al vampiro malvado que ha hecho eso. -Dice Melanie y llevo una de mis manos a mi cuello, no puedo evitar girar y mirar a Harry. El sonríe disimuladamente mientras se encoje de hombros.

Es entonces que mi teléfono comienza a sonar y sé que esta es una buena escapada, me levanto tan rápido cómo puedo mientras camino a la cocina. Quién sea que llame se ha ganado un lugar especial en mi corazón y como es de esperarse, el nombre de mi mejor amigo aparece y lo atiendo sin pensar.

Destined | H.S |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora