CAPÍTULO 39

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Foto de Nils Lewis.

"¡Hola cuernudo!"

En tres semanas pueden pasar muchas cosas ¿No?.

Pues en mi aburrida vida no, lo único bueno fue que me duró dos días el perido con dolores de mierda, me termino de arreglar una falda corta negra con un top de tirantes y un abrigo negro con botones dorados, arreglo un poco mi cabello raro ya que es la raíz es liso pero a la mitad se le forman ondas naturales que al pdinad quedan como una melena de león. Tomo mi teléfono para salir ya que van hacer las nueve y esa hora Marlena me invito a cenar.

Manejo hacia su casa, al tocar la puerta me abre Lana, con su pequeño en brazos que se nota que estaba llorando por sus ojitos rojos y nariz, al verlo hago un pequeño puchero para extender mis brazos Dante se me tira encima abrazándome, acaricio su cabeza mirando a su madre para saber el porqué llora.

-Estaba jugando con las hijas de Marlena y se cayó-me explica haciendose un lado para dejarme entrar a la casa, entro a la sala con el pequeño apoyando su cabeza en mi pecho mientras le hago cariño, Marlena al verme se levanta rápido.

-¡Te extrañe tanto mi linda novia!-chilla acercándose a mi para abrazarme con cuidado de no aplastar a Dante que no se mueve, saludo a todos hasta llegar a Oliver.

-¡¡Hola roba esposas!!-me saluda con entusiasmo causandome gracias.

-¡Hola cuernudo!-le devuelvo el saludo, el hombre abre un poco la boca y entrecierra los ojos ofendido mientras Marlena suelta una carcajada burlesca.

-¡¿Cuándo llega tía Madison?!-pregunta en un grito Valeria a sus padres-, ¡¡Tenemos hambre!!.

-¡Ya vamos a comer!-le grita Marlena a sus hijas que bajan rápido para ir al comedor.

Al sentarme Dante se queda en mis piernas sentado, Marlena se iba a sentar a mi lado pero Nils la saca y se sienta él su hermana solo lo mira mal para sentarse frente a nosotros pero yo me mantengo entretenida con Dante, el pequeño de cinco años deja que le de un poco de comida en la boca como bebé. Sonrió dándole de comer.

Okey Cole tiene razón no sería tan mala idea tener una mini yo en casa.

Después de darle un poco de comida se levanta para irse con su madre que lo llama para dejarme comer, ya que al estar dándole a él no he tocado mi plato.

-Quiero tener un bebé-comento mirando a Dante comer tranquilo al lado de su madre, las dos madres niegan apenas me escuchan.

-Cuando quieras te hago uno-me susurra al oído con un tono picaron mientras pasa su mano helada por mi muslo, lo miro de reojo para que deje de tocar.

-¿Qué te tiene tan feliz Lana?-le pregunta Axel llamado la atención de todos al ver a la rubia con una sonrisa de enamorada comiendo que al darse cuenta se sonroja.

Oliver con Axel le empiezan a hacer preguntas que no presto atención para buscar los pies de Nils y pisarlo con fuerza pero no hace ni una solo mueca que demuestre dolor.

-Deja de tocar-le pido en el susurra pero él apreta con más fuerza mi muslo.

-No. Me gusta hacerlo-me responde fingiendo prestar atención a Lana como todos los demás.

Deseo Prohibido (En Proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora