Seis años han pasado desde los eventos narrados en "Sonidos Mudos", pero la historia de nuestros personajes está lejos de alcanzar un "final feliz". La vida les ha mostrado una y otra vez que no siempre tenemos el control sobre nuestro destino. No e...
Aterrizamos anoche en Boston, Magda, Jeray y Cleo deben ir en camino a Italia. Todos trabajaremos en simultáneo y luego nos comunicaremos para definir el siguiente paso.
Nunca había estado en esta ciudad, es enorme, llena de altos edificios y pintorescos paisajes. La zona en la que nos encontramos ahora, es como estar de paseo por Londres, con las casas unidas una a la otra construidas en ladrillo rojo.
El clima es refrescante, al fin algo agradable.
—¿Exactamente, adónde vamos? —le pregunto a Brice—, no me has dicho nada, el caso es investigar a Lana Walker, y en los registros dice que ella ya no vive en este estado, de hecho, no tiene una residencia oficial.
—¿Qué más dicen los registros? —indaga Brice con tranquilidad, mientras continúa conduciendo.
Tomo una respiración y abro de nuevo el archivo en la tableta electrónica. —Es una mujer joven, soltera, reconocida en la comunidad artística como cantante de ópera, pasa la mayor parte del año viajando para presentarse en recitales. Proviene de una familia muy influyente y adinerada, su padre era director de orquesta, y su madre es pintora. Eso es todo..., oh y tiene un hijo de 4 años de edad llamado Kolia.
—Buen inicio —afirma Brice. Me molesta cuando no me revela toda la información que tiene, siempre ha sido así, primero juega contigo hasta que por fin te dice lo importante.
—Tenemos que definir qué clase de conversación tendremos con ella, ¿le mostraremos a los jefes de Athenas y que nos diga con cuál de ellos tiene relación?
—No es necesario, yo sé cuál es —asegura.
—¿Entonces? —lo miro, esperando su respuesta, pero no lo hace—, puedes dejar el misterio y hablar, ¿con cuál de los jefes tiene relación? —le exijo.
Brice hace la mueca de una sonrisa ante mi molestia y me mira de reojo. —Dmitry Kozlov.
Toda una ola de confusión viene a mi mente, aunque no pensé que Deepness hubiese sido la única mujer que le interesaba a Dima, no lo esperaba.
—¿Cómo lo sabes? —cuestiono.
—Verás, Zeth, las redes sociales están más al día que los registros —con eso, saca de su bolso y me extiende otra tableta. —Busca la página abierta de internet.
Hago lo que dice, es la cuenta oficial de un periódico digital reconocido, está abierto un artículo completo con la imagen de Dima como portada.
—Lo que allí dice, Bastian lo confirmó en una docena más de cuentas y revistas, no obstante, ese es el artículo más completo, será mejor que lo leas.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
