Capítulo 37

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Capítulo 37

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Deepness C. Bauer

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           Mañana temprano salimos de regreso a Canadá, todavía no puedo creer que finalmente volvamos a casa, hay muchas emociones envueltas en ese hecho. Hace meses salimos de allá rotos, en crisis y sin saber qué pasaría al día siguiente.

           Ahora regresamos a un hogar, convertidos en una familia, en paz y con esperanza de que los próximos tiempos no traigan más que cosas buenas. Finalmente, espero dejar a un lado esta historia e iniciar un nuevo capítulo en mi vida, uno sin más oscuridad.

          Temprano almorzamos acá en el hotel con April y Mick, luego ellos tuvieron que irse para encontrarse con la familia de él y nosotras regresamos a la habitación a descansar un poco.

          Zeth acaba de salir a hacer unas diligencias con Nina y Rooney, me alegra volver a casa con ellas, siento que pertenezco a una familia, y esa sensación es maravillosa. Agatha se encuentra en la ventana de nuestra habitación de hotel, recostada de la baranda con la mirada perdida hacia el cielo.

          Mi pequeño ángel ha pasado por demasiadas cosas en muy poco tiempo y a una corta edad, solo espero que el tiempo la ayuda a dejar de lado esta historia. Sin embargo, hay cosas que tendrán que quedarse en nuestras vidas, y aprenderemos a lidiar con ellas.

           Es tiempo de tener esa conversación entre las dos, porque quiero volver a casa con todos los sentimientos claros, solo así funcionarán las cosas.

          —Hola, nena —me paro a su lado.

          Agatha sonríe a medias, saludándome. —Hola, mami.

          —Tengo algo que es para ti —saco el sobre y se lo ofrezco.

          —¿Qué es? —pregunta curiosa y lo toma.

           —Te la envió Dima —la sola mención de su nombre hace que se tense—, salvó mi vida por un momento y acabó con alguien muy malo, así que acepté hacerle este favor.

            Ella asiente, camina hasta el sofá, se sienta y abre el sobre. —Es una carta —muerde su labio inferior y me la entrega— ¿podrías leerla?

           —Si eso quieres, cariño.

          Tomo la carta de Dima y respiro profundo antes de comenzar a leérsela:

           "Hola, piedra preciosa, es la primera vez que escribo una carta, pero me dijiste que te gustan estas cosas, así que aquí vamos.

           La vida es muy complicada y extraña, sé que no nos conocimos de la mejor forma y que tal vez ahora solo estés pensando en que todo termine y en no volver a verme nunca más, seguramente eso desea tu madre también y lo entiendo, lo que ha ocurrido entre ella y yo es algo simplemente muy complejo, no te escribo por eso, te escribo por nosotros dos.

           Seré honesto contigo, Agatha, de seguro escucharás muchas cosas espantosas sobre mí y posiblemente todas sean ciertas, no soy una buena persona y mi mundo es quizá de las peores cosas que existen en el planeta. Tu madre tiene razón al querer que estén lejos de todo esto. Soy un monstruo y no merezco perdón, no tengo derecho a pedir disculpas, así que no lo haré.

#5 La RedDonde viven las historias. Descúbrelo ahora