Reencarnación mágica en: Harry Potter y La Piedra Filosofal

029 - Primer dia

La historia original así como sus personajes no me pertenecen. El crédito es para sus respectivos creadores. Esta historia está escrita por diversión y deseo de entretener sin ánimos de lucro.

...

Peinado con cera de baja fijación, con crema de aceite de coco en el rostro, perfumado con fragancias de madera y bien vestido con el uniforme completo, Samael salió de su habitación y se dirigió calmadamente al gran
comedor para recibir su horario.

Al llegar ve varía bebidas calientes, huevos, salchichas, jugos y algunos vegetales y setas asadas.

Al sentarse, toma una taza de café y solo soporta un sorbo, realmente le resulta asqueroso.

- ¡Toma tu horario! -ordena el profesor Snape aprovechando que es el único.

- Gracias -contesta Samael con simpleza y saca una botella de sangre.

El profesor hace una cara extraña, pero guarda silencio y se retira.

Poco después ve llegar a Hermione y Harley, acompañadas de otras dos chicas: una de piel morena y otra blanca con rizos dorados. Ambas, sobre todo Harley, parecía contenta de tener amigas.

- Vaya, parece que hicieron nuevas amigas -dice Samael sentándose frente a las chicas, que parecían sorprendidas de que un slytherin se sentarán con gryffindor -, es un gusto conocerlas.

- El gusto es mío -dice la chica rubia, muy emocionada -, mi nombre es Lavander Brown.

- Yo soy Parvati Patil -se presenta la chica morena-, soy de la India.

Así, empezó una pequeña plática, mientras los demás estudiantes antes iban llegando, algunos mirando raro a el grupo que hablaba con Samael. Para más frustración de algunos, ya que no había regla que impidiera que se sentarán en otras mesas, Britta y unas nuevas amigas de su casa Hufflepuff y Gisele y unas amigas de Ravenclaw, que incluso a la hermana de Parvati, se sentaron en la mesa de Gryffindor.

A diferencia de lo que Samael esperaba, que sería algo de calma en su camino a clases y en estas mismas, parecía que su fama estaba cerca de la de los gemelos: no podía girar en una esquina sin que los murmullos empezarán.

- ¡Mira! -susurraba alguien - Ese es el chico dragón.

Así fue hasta que llegó a la clase de el fantasma, la clase era compartida con los Hufflepuff, así que, junto a Britta, Sussan y Hannah, decidieron saltarse la clase, acompañados de Daphne, Lyra y Pansy. El profesor Binns no enseñaba mal, pero su clase era el libro, no había razón para adormilarse en la clase, prefirieron estudiar por su cuenta.

Luego de pasar el rato en la biblioteca, los Slytherin fueron a transformaciones y los Hufflepuff a encantamientos.

Samael tomó asiento en la parte delantera del salón de clases y saludó a la profesora, sorprendidola, pero sin lograr que regresará a su forma humana. Tal vez no lo sorprendió a él, pero seguramente los demás alumnos quedarán con la boca abierta.

Poco después, sus amigas llegaron acompañadas del resto de Ravenclaw.

Cuánto todos estuvieron sentados, la profesora McGonagall saltó de su escritorio y sonrió ante la relación de sorpresa de todos.

- La transfiguración es una de las ramas más complejas y peligrosas de magia -explica la profesora de manera teatral, dándole una mirada a casa estudiante -, si vienen aquí a perder el tiempo serán despedidos de el aula… están advertidos.

Al ver qué todos comprendieron, transforma un escritorio en un cerdo y viceversa.

Todos estaban emocionados, menos Giselle y Samael, que sabían que no sería tan simple como lo hizo parecer la profesora.

La siguiente hora se la pasaron tomando apuntes, mientras la profesora repetía lo peligroso que son las transformaciones mal hechas.

Al final, la profesora repartió unos fósforos y pidió a la clase, que la transformará en agujas.

Ya que Giselle y Samael, eran los más diestros en esta rama,  ayudaron a Padma. Lyra, Daphne y a Pansy. Aunque Pansy se portaba reacia al principio ya que quería adular a Draco, pero unas palabras con Lyra, la convencieron de unirse a las chicas y luego, aceptar la ayuda de Samael.

Al final, Samael consiguió el primer lugar y ganó diez puntos por el minuto en el que lo logró, las chicas consiguieron cinco y fueron de las diez que lo consiguieron perfectamente.

Después de eso tuvieron un descanso para comer, así que sin más se dirigieron al comedor y vieron de nuevo a Hermione y Harley con Lavender y Parvati, está vez estaban hablando con sus amigas de Hufflepuff, también, disgustando un poco a los demás.

Claramente, Samael no le dio importancia y se dirigió a la mesa de los leones.

- Las primeras clases son más básicas de lo que esperaba - comenta Giselle algo decepcionada del nivel que les pusieron el día de hoy.

- No seas mala Giselle -dice Britta causando que Giselle se alegré, por dentro, al ver qué su amiga oe sigue hablando -, ya sean de familias mágicas, mestizas o muggles, la mayoría no ha recibido educación mágica.

- ¿Es cierto eso? -pregunta Harley algo aliviada por no ser una mala estudiante.

- Completamente, Harley -respondió Hermione -, yo lo descubrí cuando conocí a Samael y poco después a una familia de magos.

- Así que no te agobies -anima Padma subiendo los ánimos de Harley.

- ¿Qué hacen ustedes aquí? -pregunta Ron enfadado al ver a miembros de casas diferentes, sobre todo serpientes, en la mesa de los leones.

- Por cierto Harley -dice Samael ignorando al pelirrojo, para enfado de éste y sus amigos: Harry, Neville y Seamus-, deberías estudiar las primeras lecciones de pociones -sugiere confundiendo a la mencionada, después de que estuviera algo triste por qué no podrán ser todos amigos como van las cosas-, el profesor Snape ni es muy bueno con cualquiera que no sea de Slytherin, sobre todos los gryffindor.

- ¡No nos ignores! -grita  Seamos preocupando a Neville e incomodando a Harry - No deberían estar sentados aquí.

- No existe regla que nos impida sentarnos aquí ¿O si? -dice Giselle enojando y asustando a Ron y los demás.

Ro se queja a gritos y Giselle sonríe en silencio. La pelea hubiera continuado si Percy Weasley no hubiera llegado, para empezar, regañando a su hermanito por sus gritos.

- ¡Ellos no deberían sentarse aquí! -se queja Ron.

- Señor prefecto -dice Britta, participando por primera vez en la discusión -, no existe una regla que impida que nos sentemos ¿Estoy en lo correcto?

- En efecto, no la hay -dice Percy, viéndose vencido por las reglas, a él tampoco le agradan mucho los Slytherin -, son libres de sentarse donde deseen.

Ron Iba a protestar nuevamente pero Percy lo amenazó con bajarle puntos, lonquebhizo que se callara.

- Harry - llama Harley a su hermano- ¿Quieres sentarte?

- No gracias -dice después de ver a sus amigos-, ya tendremos tiempo en la sala común.

- Tranquila Harley -dice Lyra tomando las manos de Harley -, terminará aceptando tus amistades.

Siguieron comiendo y al regresar a sus habitaciones para las clases de la tarde.

Harley siguió el consejo de Samael y se puso a estudiar los primeros temas de su libro de pociones, había visto a ese profesor y su cicatriz  le dolió al verlo. Es mejor ser precavida.

...

Continuará...

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