Reencarnación mágica en: Harry Potter y La Piedra Filosofal

010 - Libro abierto

La historia original así como sus personajes no me pertenecen. El crédito es para sus respectivos creadores. Esta historia está escrita por diversión y deseo de entretener sin ánimos de lucro.

...

- Hoy tendremos otros clientes -avisa Kukulcán a Samael que quería salir a visitar la playa-, te prometo que valdrá la pena.

- Aún así iré después de que acabe el trato -dice Samael algo disgustado -, necesito desestresarme y el mar es ideal.

- Cómo gustes… te encargas de lo más ligero, yo de arreglar el motor -acepta Kukulcan-, si hicieras más me podrían acusar de explotación infantil.

Ambos bromeaban otro rato pensando que si el mundo fuera un poco más popular podrían hacer modificaciones extravagantes a los autos. Tal vez deberían promoverlo más entre los más jovenes, era su línea de pensamiento cuando vieron un Austin Princess 1981 de color blanco y azúl.

- ¡Señor Santana! -saluda un hombre alto y delgado saliendo del auto junto con una mujer un poco más baja y una niña con el cabello alborotado.

- ¡Señor Granger! -saludó el mencionado acercándose mientras jalaba a Samael para saludar- Realmente es una persona puntual.

- Bueno la mayor parte del tiempo lo somos -dice el dentista-, nuestra hija nos presionó para llegar a tiempo.

- ¡Papá! -se queja La pequeña avergonzada.

- Por favor dígame Hermes -dice el señor estrechando la mano de Kukulcán -, ella es mi esposa Jane y ella es mi hija Hermione.

Las mencionadas saludan formalmente y luego me miran fijamente.

- Él es Samael -dice Kukulcan sin mencionar que es su hijo -, él me ayuda algunas veces.

- Un placer conocerlos señor Granger… señora Granger y pequeña Granger -saluda Samael sin darse cuenta que el decirle pequeña a Hermione le molestó ya que iba a cumplir ocho años.

- ¿Qué edad tienes? -pregunta Hermione enfurruñada haciendo que los adultos se rían.

- Tengo siete y medio -responde Samael sin importarle mucho.

- Yo tengo ocho así que soy más grande -dice Hermione orgullosa.

- Mido un metro veinticinco -dice Samael sonriendo de lado.

- Eso no importa -dijo Hermione evitando responder.

- Mide un metro diez  -confiesa Jane haciendo que Hermione se  avergüence..

- Porque no hablamos del auto dentro, con un poco de té claro -dice Kukulcan invitando a la pareja a entrar.

- Iré a la playa a pasear -dice Samael separándose un poco del grupo-, volveré en un par de horas.

- ¿Podrías llevarte a Hermione? -dice el señor Hermes empujando levemente a su hija hacia Samael- Creo que se aburrirá un poco aquí.

Antes de que Termine protestará, Samael aceptó y la jalo para que ambos fueran en bicicleta hacia la playa y entre risas, los adultos entraron al local a hablar de negocios.

- ¿Cómo iremos a la playa? -pregunta Hermione algo malhumorada - Preferiría ir a una biblioteca.

- Yo también -dice Samael sorprendiendo a Hermione -, sin embargo se debe descansar constantemente, agobiarse no vale la pena -explica haciendo que Hermione piense como cuestionarlo-. Sobre el cómo iremos .. usaremos mi bicicleta.

Hermione pensó una forma diferente de ir a la playa, pero no lo logró, sin más opciones se subió detrás de Samael y lo abrazó, algo avergonzada, y mientras el viaje duraba se mantuvieron callados.