Reencarnación mágica en: Harry Potter y La Piedra Filosofal

50 - Lo siniestro

La historia original así como sus personajes no me pertenecen. El crédito es para sus respectivos creadores. Esta historia está escrita por diversión y deseo de entretener sin ánimos de lucro.

...

Harley quería correr, volar, aparecerse, cualquier cosa para llegar adónde su hermano estaba ahora, pero no lo hizo,

Samael le dijo que sí pudieron lanzar la alerta, no debía ser tan peligroso, así que le creyó. Además, aunque no le dijo, podía sentirlos, estaban vivos y no olía a sangre.

- Sam… ¿Qué crees que sea lo que acecha el bosque? -pregunta Harley para pensar en algo que la distraiga.

- Posiblemente… algo que no le importa matar, no de forma irracional, sino consciente y también con gusto -explica Samael, sin darle muchos detalles.

- ¡Los encontré! -dijo Hagrid, con obvio enfado - Los tontos empezaron a discutir y empezaron a lanzarse chispas.

Harley, molesta y decepcionada con su hermano, ni siquiera  lo saludo.

- Cambiaremos los grupos para evitar que esto suceda otra vez -dice Hagrid suspirando, no quería molestarse más por una pelea de niños.

- Si no te importa, Hagrid, yo acompañaré a los tres -dice Samael, llamando la atención del dúo de chicos que no lo habían notado.

- No puedo dejar a todos… me llevaré al rubio -dice Hagrid, sin dejar protestar a Draco, quién fue jalado y empinado por el guardabosques - ¡Tengan cuidado!

Hagrid se aleja, de ahora, tres pelinegros que empiezan a avanzar lentamente por el otro sendero, que se hacía cada vez más difícil de recorrer, pues a cada paso, los árboles lo obstruyen al igual que los arbustos.

Las respiraciones de los gemelos empezaban a volverse más fuertes, el repentino silencio del bosque los perturbó.

Con algo de dificultad, atravesaron la densa barrera verde, logrando llegar a un claro iluminado por la luz de la luna, pero no tuvieron tiempo de alegrarse, frente a ellos se hallaba una vista horrorosa y triste: una criatura que era increíblemente bella estaba tirada, su cuerpo y patas cubiertas por su propia sangre que sólo era más aterradora con la criatura encapuchada que yacía sobre ella succionando su sangre vorazmente.

Harley y Harry son un grito ahogado, pero fue suficiente para que la criatura los escuchará.

Harley y Harry, de repente, cayeron al suelo sujetándose fuertemente la cabeza, la cicatriz les dolía demasiado, apenas podían estar concientes por el dolor que sentían, pero pudieron ver cómo esa cosa se separaba del unicornio y se dirigía a ellos.

Pero algo se interpuso en su camino, más bien, alguien.

- Sam, corre… - pide Harley en voz baja, apenas audible.

- No te preocupes, no moriré -dice Sam que se lanza contra la criatura, para deshacerse de esa cosa.

Samael sabía que Quirrell estaba debajo de esa capucha, nunca se supo que tan bien mago era, pero podía derribar trolls sin problemas, así que no debía bajar la guardia.

Con un potente golpe, Samael se lanzó en contra del profesor calvo, quien salió volando y se estrelló con un grueso roble, tirándolo en el proceso.

- ¡Confringo! -,grita el encapuchado tratando de destruir a Samael.

La roca donde estaba Samael explota en cientos de pedazos y algunos se dirigen a los gemelos.

- ¡Protego! -dice Samael, ya que Harry no tiene brazalete.

El profesor Quirrell aprovecha y lanza un cruciatus hacia Samael, causándole un dolor indescriptible haciendo que caiga al suelo.

Se escuchan dos risas por el resultado, lo que confundió a Harley que era la que estaba en mejor estado, quería correr hacia su amigo pero la barrera no era simple.

- ¡Muere, fenómeno! -dice Quirrell con voz que contenía locura.

Samael, adolorido pero enojado , levantó la cabeza y una ola de fuego sale de su boca , quemando al profesor en casi todo el cuerpo.

- ¡No creas que será tan fácil pendejo! -grita Samael, levantándose y golpeando al profesor nuevamente, rompiendo varias costillas en el proceso.

Samael era rápido y no era débil, pero el profesor no era poco hábil, sumando la parte de Voldemort que le ayudaba y la sangre de unicornio que bebió, era peligroso, así que ambos se tomaron en serio a su oponente.

Maldiciones, golpes y  fuego iban de un lado al otro por poco tiempo, el profesor era extremadamente precavido y creó varios fuertes protego a su alrededor y aunque Samael rompió varios, aún le quedaba uno.

- ¡Arresto momentum! -dice Quirrell cuando su última barrera cae, paralizando temporalmente a Samael.

Una sonrisa malvada apareció en el rostro de Quirrell, que alzó su varita preparado para lanzar una maldición asesina.

Pero antes de que pasara, un centauro apareció y ahuyentó al profesor, no creía poder con dos, ya que el hechizo que detenía a Samael solo duraba unos dos segundos.

Cuando la figura encapuchada desaparece en la espesa niebla, que en olvida al oscuro bosque, Samael salió de la parálisis, pero decidió no seguir al profesor. Harley era más importante y debía estar a su lado, no sabe si algo pueda pasarle para que el destino se cumpla. Hasta salir del bosque, las estrellas no fallaran.

- Gracias por la ayuda, señor centauro -dice Samael, aunque ese avada kedavra podría haberlo esquivado, apenas, pero hubiera podido.

- Soy Firenze, no deberían estar aquí -dice suavemente pero con preocupación -, es bosque nones seguro en este momento…

- ¡Sam! -grita Harley, saliendo por fin de la barrera, que se quitó al desaparecer Quirrell - ¿¡Estás bien!?

- Estoy bien, Harley -responde Samael, abrazando así amiga -. Me distraje pero podría haberme salvado, no te preocupes.

Harley lloró en respuesta, su primer amigo, quién les cambió la vida y habló de sus orígenes, estuvo en riesgo de muerte, ese destello verde… sabía que no era un hechizo normal.

- Debemos irnos pequeños -dijo Firenze acercándose-, los llevaré al castillo.

Acto seguido, Firenze se arrodilla y deja que los gemelos suban a él.

- ¡Firenze! ¿Qué crees que haces? -dice Bane llegando junto a Ronan - ¿Acaso no viste lo que muestran las estrellas? ¡Además llevas a unos humanos como si fueras mula!

- Señor Bane -interviene Samael-, él no interfirió, fui yo quien lo hizo y debo decir… gracias a su respuesta sobre Marte.

Eso pareció alterar a los tres, pocos magos eran capaces de entenderlos y a pesar de que no le explicaron que pasaría, logro descifrarlo.

- Y… si él no hubiera estado…  yo hubiera interferido  -dice Firenze valientemente provocando una pequeña disputa -, lo que acechaba el bosque era maligno, mató muchos unicornios por amor a los cielos, así que si debía interferir para que esto pare ¡Lo haría!

Cada quien se fue por su lado, Samael decidió regresar por su cuenta, después de todo no lo habían castigado.

Pero antes de que se fuera, sintió algo, se dio la vuelta y lo vio... el unicornio seguía vivo.

...

Continuará...

Gracias por leer

Siganme, voten, compartan y comenten

¿Gusta?

¿No gusta?

¿Opiniones?

¿Sugerencias?

...

Si gustan apoyarme donando...

$$$

https://www.paypal.me/Quetzalcoatl969696