Capítulo 18.

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Hizo sonar su cuello antes de soltar una suave queja, su cuerpo se sintió caliente ya que su presión de ganar, la estaba llevando a relajarse por alguna extraña razón.

A caso ser alguien que tomaba la idea de sobrepasar sus limites... ¿Era una causa de triunfo? Emily no podía creer que su cansancio haya desaparecido durante aquellos minutos que llevaba corriendo por el campo. Literalmente se sentía bien y ver a los chicos siendo su gran apoyo hasta la hizo sentirse más motivada que nunca.

—'Tarjeta amarilla para Emily Shoei, por muestra de violencia.'

—¡Oh por Dios! —se quejó después de caer sobre la espalda del menos indicado, Bachira había caído contra el suelo hasta al punto de estampar su cara contra el cesped... Emily había hecho un salto de flick flack para poder lograr detener el balón que iba directo a su dulce Meguru, lamentablemente no midió la intensidad de su voltereta y ésta se estampó de forma algo brusca contra él— ¡Lo siento mucho, Bachira..! —se disculpó totalmente alterada y muy apenada rodando en dirección al suelo, Meguru estaba bastante mareado, tanto que por un instante, la noción del tiempo se detuvo a su alrededor— ¿Estás bien? ¡¿Te lastime?!

—A,A,Aahh...

Éste ni siquiera pudo responder como era debido, una suave queja se escapó de entre sus labios pues jamás se imaginó que aquél pase, lo llevaría directo al suelo.

—¡Bachira! —llamó Isagi luego de que Meguru pudiera recuperarse lentamente de aquella falta, todos a excepción de Rin, se acercaron pues saber que Emily pudo haberse lastimado(por ser mujer), los hizo preocuparse de inmediato.—

—Estoy bien, ¿A caso piensan que no soy tan fuerte como ustedes? —Emily golpeó ligeramente el pectoral derecho de su hermano mellizo, Barou la tenía sujeta de las mejillas y apretando de éstas, la cara de Emily se puso más roja gracias a la rabia que le ocasionó que ellos pensaran que era una chica débil— Deja de apretarme las mejillas, Barou... ¡Suéltame!

—¿Estás bien, amigo?

—Estoy bien...—musitó sentándose luego de haberse tomado la cabeza, Meguru seguidamente soltó una suave risilla pues ver el cómo una chica lo había mandado a volar, era algo que jamás se había pasado por su mente— ¿Estás bien, Emily? —Emily dejó de refunfuñar cuando la suave de voz de Bachira la llamó, todos se mantuvieron tranquilos. Incluso Rin pese a verse desinteresado, su interior se sintió aliviado de saber que Emily no se había lastimado— Esa caída fué algo brusca, ¿Te lastimaste?

—Lo estoy...—respondió poniéndose de pié gracias a las grandes manos de su hermano sujatandola ésta vez por los antebrazos— La pregunta es si tú estás bien, ¿Te duele la cabeza? Creo que no medí la intensidad de mi salto...

—Siento algo entumesida la espalda —respondió entre pequeñas risas, Isagi sonrió pues le alivió saber que su compañero no se había lastimado algo— Admito que fué algo gracioso.

Emily soltó una pequeña risa mientras se acercaba a él y le daba un abrazo, era lo menos que podía hacer pues alguien tan dulce y lindo como lo era Meguru Bachira, no podía perderse de un abrazo.

Se separaron dándose 5 y seguido de eso todos comenzaron a formarse nuevamente. El partido estaba parejo, por lo tanto, tenían que dar más de ellos para poder obtener un buen resultado.

[Y el equipo blanco estaba totalmente decidido a quedarse con ese triunfo, esa noche.]

—Ten cuidado, por favor —la regañó sin mostrarle molestia, Emily lo miró a los ojos. Sabía que Barou solía preocuparse intensamente cuando se ponía en peligro, eran mellizos, él estaba demasiado conectado a ella, tanto que el agobio de imaginarse perderla como esa vez en aquél accidente, lo hacía desmoronarse y por eso eran tan posesivo que no quería incluso a ningún idiota cerca de su más grande tesoro.—

Crónicas de un futbolista. (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora