¿Ahora me ves? |Ziam|

Capítulo Dos

Juntando sus articulos de arte, Zayn arrojó todo dentro de su mochila desordenadamente y cerró el cierre mientras escuchaba a los demás estudiantes salir del salón de forma demasiado silenciosa. Este era su segundo año en la universidad, la única razón por la que seguía en el maldito lugar era que le servía de fachada para evitar responder con la verdad cuando su familia le preguntaba de donde sacaba dinero. Ellos le habían rogado que abandonara su puesto de trabajo en el taller cercano luego del problema con las carreras, así que necesitaba otra tapadera. No era como si pudiese decirles algo como "Gano mi dinero en carreras clandestinas" eso lograría que le cortaran lo que lo hacia hombre, era más fácil decir "Vendí un par de cuadros". Si, eso era algo que su madre si creería sin problemas.

Arrojando su mochila sobre su hombro, revolvió en sus bolsillos en busca de su telefono para poder llamar a Louis mientras seguía el camino de los demás. Era el último día de clases antes de las vacaciones de navidad y estaba seguro de que Louis estaba pensando en emborracharse para "festejar" tal suceso. La verdad sea dicha, Louis festejaba hasta que el sol se ponía si eso involucraba atiborrar de alcohol su sistema.

Encontrando el aparato, caminó por el pasillo mientras le marcaba al castaño. Estaba a punto de llevarse el mismo al oido cuando detectó un sútil movimiento en la esquina del pasillo que daba a los baños.

Volviendo tres pasos atrás, miró a las personas escondidas allí—. ¿Que estan haciendo?

Lena sonrió mientras Kate empujaba los binoculares que evidenciaban lo que estaban haciendo dentro del excesivamente grande bolso que colgaba de su hombro.

—¡Hermanito! —la morena estalló, abriendo los brazos para envolverlo—. Pensamos que ya te habías ido a casa.

Colocando dos dedos en el abdomen de su hermana, Zayn alejó a la chica antes de que pudiese concretar el abrazo y arqueó una ceja en su dirección—. ¿Realmente piensan que voy a tragarme que estan aquí por casualidad?

—Por supuesto que sí —Kate lo dijo como si fuese algo totalmente obvio, arrojando su rojizo cabello sobre su hombro para parecer más casual—. Lena quiere comprar un par de cuadros para decorar su casa y decidimos que este era un buen lugar para buscar algunos. Despues de todo te educan a ti, uno de los mejores artistas de este siglo.

—La próxima vez que te inventes una excusa, no adules tanto a quien la reciba porque solo eso te pone un gran cartel de culpable en el medio de la frente —aleccionó a su cuñada antes de mirar nuevamente entre ellas—. Ahora, diganme que estaban haciendo aquí porque creanme, estoy haciendo todo lo posible para no creer en lo que es obvio y tener que decirle a mi madre que su adorada hija y su amadisima nuera estaban perdiendo su tiempo espiandome.

—Pff, nosotras no estabamos espiandote.

—Las acabo de encontrar escondidas e intentando ocultar un par de binoculares de mi, Lena, si no estaban espiandome, ¿que se supone que hacen?

—Estabamos... estabamos...

—No te estabamos espiando a ti. —Kate soltó.

Zayn sonrió burlonamente y Lena cubrió su rostro con sus manos, soltando un chillido de prostesta—. ¡Acabas de delatarnos, idiota!

—No, no lo hice.

—Si lo hiciste —la miró como si fuese tonta—. Acabas de aceptar que estabamos espiando, es obvio que él no se va a creer que espiabamos a otra persona.

—Oh —Kate pareció entender—. Lo siento. 

—No importa.

Balanceando la mochila en su hombro, Zayn miró a ambas mujeres con cansancio—. Me estan dando dolor de cabeza y no hemos hablado ni cinco minutos —susurró para si mismo antes de suspirar—. ¿Me pueden decir por qué me espiaban?