Capítulo Cuarenta y Seis

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—¿Crees que este bien dejarlos solos en la habitación?

Quitando la mirada del televisor, Zayn le lanzó una mirada extrañada al castaño—. ¿Por qué no habría de estarlo? Tienen ocho y seis años, lo maximo que harán será arrojar refresco sobre las almohadas, deja de preocuparte tanto.

—¿Como puedes estar tan tranquilo?

—Porque Max tiene seis años —repitió, poniendo enfasis en las últimas palabras—. Comenzaré a preocuparme cuando tenga dieciseis y traiga un chico a su habitación. En ese momento, será justificada tu crisis de locura. Ahora, solo pareces una mamá gallina que perdió de vista uno de sus polluelos.

—Estoy preocupado. —se excusó.

—Estas exagerando.

—No me juzgues, soy nuevo en esto, no sé cuando esta bien comenzar con la sobreprotección. 

—Te guiaré en esto —le sonrió con dulzura—. La sobreprotección esta bien cuando... ¡Nunca! 

—¿Y que se supone que haga entonces? ¿Cual es mi trabajo?

—Cuidarlo.

El ceño castaño se frunció—. Pero, me dijiste que no puedo hacer eso.

—No, te dije que no debes exagerar cuando lo haces. —rodó los ojos—. Es totalmente normal que Max tenga amiguitos y los invite a venir, deja de intentar convertirlo en un solitario, es bueno que socialice.

—No estoy en contra de que socialice, es solo que ese pequeño me da mala espina.

—¿Te das cuenta de que tienes celos de un niño de ocho años?

—¿Te das cuenta de que ese niño va a crecer pronto y querrá meterse en los pantalones de nuestro hijo? —replicó.

Dejando caer su cabeza contra el respaldo del sofá, Zayn soltó un pesado suspiro—. Ahí vas de nuevo con tu delirio, ni siquiera voy a intentar detener tu paranoia.

—No es paranoia.

—¡Liam, Max tiene seis años! ¡Seis! No dieciseis, seis, nada de lo que tu mente maquina sucederá en un corto lapso de tiempo. Faltan años para que Max tenga un novio formal y esa idea cruce por su mente, deja de hacer un escandalo por ello.

—Pero... pero... agghh.

Zayn lo miró y se tuvo que reir de él, era imposible no hacerlo cuando Liam parecía tan desconcertado—. Te quedarás calvo antes de que Max sea legal, ¿lo sabes?

—Lo sé, y eso solo me estresa más, ¡ya dejame!

Riendo por lo bajo, Zayn volvió al televisor y subió un poco el volumen, aun así podía escuchar los pasos de Liam en su ida y vuelta frente al pasillo. El chico iba a enloquecer, él ya podía ver las puertas del manicomio más cercano abiertas de par en par en su espera. Y como no había mucho más que hacer, Zayn solo se reiría del proceso que lo llevaría allí.

El celular del castaño sonó en un momento dado y Zayn lo escuchó discutir en él por un momento, pero no prestó especial atención a sus palabras. Cuando colgó, se acercó a donde él se encontraba sentado con el pie enyesado acomodado sobre la pequeña mesa ante él.

—Era del trabajo, debo salir por un par de horas —lo besó suavemente—. Vuelvo pronto, mantén al pequeño chico vigilado.

—No se preocupe, oficial, tengo todo bajo control.

—Hablo enserio, Zayn.

Sonrió—. Lo sé.

—Mantenlo en tu línea de visión, él es peligroso.

¿Ahora me ves? |Ziam|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora