Capitulo 15

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-Edgar

Tenía el sabor del limón dulce en mis labios, no me hacía falta un par de cervezas o de copas para besarla, era una excusa si salía mal, al final renunciamos.

Alcancé su nuca, con mis manos rozando su piel blanca y suave, roce su nuca con las yemas de mis dedos, mientras sus ojos verdes me miraban con ansias.

La atraje hacía mí y la besé, con ganas, con ansias, saboreando sus labios que tenían un pequeño sabor a limón, su lengua caliente rozaba lentamente con la mía.

Después de besarla veía como estaba agitada, como su respiración aumentó, y como me miraba avergonzada.

Después de ese beso, me perdí entre unos y otros, era imposible separarme de algo que quería desde un poco antes de verano y ya empezábamos agosto.

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