HERMANO POR INTERCAMBIO ( I - II Parte)

Nueva familia

-¡Corre, Courtney!.- Grita mamá.- ¡Sube al avión!

-¡Adiós, los amo!.- Grito antes de subir al avión.

Subo y busco mi asiento, el cual queda al lado de la ventana junto a una señora gorda que ocupa su asiento y un poco del mío.

Miro a mis padres desde la ventana hasta que el avión despega y los pierdo de vista.

¿Cómo me presentaré con la familia que me recibirá de intercambio por un año? ¿Y si no me gustan? ¿Y si no les gusto?

Estoy a solo un día de año nuevo. Una de las reglas del intercambio decía que debemos pasar año nuevo con la nueva familia.

Bien, concéntrate, Courtney.

"Hola, soy Courtney Newman, soy la chica que viene de intercambio. Vengo de Oregón, tengo 17 años. Un gusto conocerlos."

Prefiero dormirme todo el viaje, de lo contrario me aburriré más que con las charlas de mamá, que de seguro las extrañaré.

Fin del viaje. Bajo del avión con todas mis maletas -que por cierto son muchas- camino con lentitud mientras busco con la mirada a alguien o quién sea que venga por mi. Me siento sola y una completa idiota arrastrando las maletas.

A lo lejos veo una mujer de cabello claro, un hombre de la acompaña y un chico que supongo que es su hijo. Sostienen un cartel que dice mi nombre. Me acerco a ellos.

-¿Tú eres Curtny, Curny, Cotrny?.- Pregunta la mujer sin poder acertar a mi nombre.

-Soy Courtney Newman, soy la chica que viene de intercambio. Vengo de Oregón, tengo 17 años. Un gusto conocerlos.- Digo sonriente.

-Un gusto.- Sonríe amplio.- Somos la familia Feldman. Él es mi marido, James y él nuestro hijo Tyler.- Codeo al chico.- Saluda, cariño.- Susurra.

-Tyler.- Dice el chico y estiro mi mano, pero él solo saluda con un movimiento de cabeza. Sin siquiera hablar con él ya me cae mal.

-Y bueno, falta nuestra hija Emily, pero ella se ha ido de intercambio al extranjero. Olvidé presentarme, mi nombre es Rebecca.

-Vamos a casa.- Dice el hombre.

Luego de subir mis maletas en su auto que es Wooh, precioso. James conduce por las calles de Beverly hills con Rebecca de copilo y Tyler va sentado junto a mi en el asiento trasero.

Durante todo el camino me nombran las calles. Esto parece un tour y la verdad es que no me interesa aprender el nombre y aunque quisiera tampoco podría, no he aprendido las calles de Oregón que es donde he vivido toda mi vida y aprenderé las de acá.

No sé donde carajos, pero estamos por un lugar donde las casas son como en las películas, gigantes, piscinas, jardines preciosos y todo.

-Llegamos.

Aparcan el automóvil fuera de su humilde hogar que debe de costar una fortuna.

Eso explica la mirada de desprecio que me dió Tyler, de seguro es uno de esos hijitos de papi y mami que se creen no sé qué por su dinero.

Entramos a la casa y me muestran cada rincón de ésta. Parece como sacada de película.

-Esta será tu habitación, espero te guste.- Dice Rebecca mientras un hombre vestido de traje trae mis maletas.

Mi pieza parece una caja de fósforos comparada a ésta.

-Te dejaré para que guardes tus cosas.- Toca mi hombro.- Si necesitas algo solo baja al primer piso, vas a la cocina y le hablas a Abbie, la empleada.

Es difícil decidir en que parte guardar la ropa cuando tengo lugares de sobra. Ordeno con dedicación cada cosa ¡Qué lindo me quedó!

La puerta suena y digo "pase" sin ver quién es.

-Lo siento si fui grosero.

Me giro y veo a Tyler ¿Disculpándose? Bien, creo que no es tan malo como creía.

-No es nada.- Sonrío.

-Solo vine porque mamá me regañó.

Retiro lo dicho, es un estúpido.

-Bueno.- Me giro y continúo ordenando la ropa solo para parecer que hago algo.

-¿Tienes 17?

-Sí.- Respondo sin voltearme.

-Entonces seremos compañeros de curso.

-Qué emoción.- Digo sarcástica.

-Lo emocionante aún no comienza, solo espera unos días y me conocerás, Curt...

-Courtney.- Corrijo.

-Courtney.- Repito.- Qué nombre más raro.- Dice con asco.

-¿Terminaste?

-No.

-Argh.- Ruedo los ojos.

-¿Ya me odias?.- Sonríe de lado.

-Odiar no, pero ya comienzas a desagradarme.

-Lo lamento por dar una mala impresión.- Estira su mano.- Comencemos de nuevo.

Frunzo el ceño y le doy la mano.

-Sello los tratos con apretón de mano y beso.

-En la mejilla.- Digo rápidamente.

-No exactamente, pero si así lo quieres puedo hacer una excepción.- Ríe.

Hay que admitirlo, no es feo, tiene lo suyo y bien que lo tiene.

-Mañana es año nuevo.- Se acerca a mi.- Año nuevo, vida nueva.

-Así dicen.

-Y así creo que será.- Me guiña un ojo y sale de mi habitación.

Es una excelente mezcla entre su madre y padre. Un chico alto, cabello café claro y ojos oscuros como su papá y tez clara, rasgos finos como la mamá.

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Hermano por intercambio está de vueltaaaa*--*

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