Flor Prohibida | Kookgi

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Seokjin y Jungkook miraban al pálido desde el interior, mientras el pálido fumaba.

—Vaya. No esperaba que rechazaras la cita, por ese tipo.—Suelta Seokjin.—¿Tiene complejo de chimenea?

Hace un ademán para ver juntos como Yoongi suelta humo.

—Ni siquiera soportar el olor a cigarro, Jungkook. Además, parece de dudosa higiene. No me gusta, aunque eso te dará igual. Si ya lo metes en casa...

—También es mi casa Hyung. Además, no seas tan cruel. Ni siquiera lo conoces, no te hagas ideas erróneas.

—No hace falta conocerlo mucho para darse cuenta que te complicará la vida. Y fuma, eso es un habito arquero Jungkook.

—Lo sé. Lo sé. Tampoco me agrada eso, pero puedo ayudarlo a que lo deje.

—Veo más probable que el te ayude a probarlo. En fin eres mayorcito para hacer lo que quieras con tu vida, pero...cuídate.

—Sí. Hyung. —Dice y regresa junto a Yoongi.

—¿A dónde fuiste?

—Mi Hyung justo había llegado. Ya se ha ido a la habitación.

—Hmmm, entonces ¿debería irme?

—Sí. Aunque me gustaría que te quedarás un rato más...¿Sigues muy mareado?

—Que va. Esto no es nada. Llegare bien en casa. Mira, mi coche se ve desde aquí.

—¿Conducirás borracho?—Jungkook abre los ojos al ver al pálido asentir.—No, entonces debes quedarte. No puedo dejar que te vayas así. O pides un taxi o te quedas aquí.

—¿Quedarme aquí?—Abre los ojos.

Jungkook le invita a entrar a su habitación y le deja acostarse en la cama, o al menos, le cede el lugar. Pero Yoongi niega.

—Yo dormiré en el suelo. He dormido en peores sitios, esto es cálido en comparación.—Dice y se acuesta junto a la almohada que le deja Jungkook y la manta.

A Jungkook le es imposible no sorprenderse. Cualquier otro chico, en el lugar de Yoongi hubiera intentando meterse en su cama, y el no se lo hubiera negado si se encuentra cómodo con la presencia del otro. Incluso hubiera tenido ya un primer beso, pero Yoongi, ni siquiera hacía intento alguno en acercarse a él.

Lo observo unos minutos para darse cuenta que el pálido esta dormido profundamente, y aunque no se pudo relajar de inmediato por saber que el pálido dormía en su suelo. Pudo descansar después de contarle todo a Jimin por chat.

A la mañana siguiente, sin embargo, Yoongi se marchó y regresó a su casa para el entrenamiento. Y también para la comida que tendrían con el Alcalde.

Mientras Jungkook, al despertar, se desconcertaría al ver que Min uno está, pero si el olor a cigarro y alcohol en su habitación.

—Huele horrible—Admite Jungkook y comienza airear la habitación para darse una ducha porque siente impregnado el aroma en él.

[...]

Yoongi consiguió el donativo para la asociación del comedor social. Y su padre parecía curioso al respecto.

—¿Por qué? Nunca te importó nada.

—No lo hago por mí. —Se enciende otro cigarro.—Sí el Alcalde es reelegido y se gana el apoyo de la gente, te beneficias ¿no?—Asiente—Pues ya está.

—Bien Yoongi. Hoy iremos todos a los clubs. Tengo ganas de probar la carne fresca.

—Sí van a ir todos. Yo me abstengo, quiero descansar.