Flor Prohibida | Kookgi

22

El domingo había llegado, y Yongi estaba nervioso tomando el regalo que Jungkook le había hecho. El chico le había regalado una camisa celeste y lo ayudó a arreglar su cabello.

Por fin se cumplía el día en que os amigos de Jungkook conocerían a su novio, y estaban ambos muy alegres al respecto, aunque Yoongi estuviera ansioso por dentro.

—¿Y si no les caigo bien?—Dice cuando suben al coche y lo arranca.

—Eso da igual, porque a mi ya me caes bien y te quiero.—Dice apretando su rodilla y sonriendo. A Yoongi se le escapa un suspiro y Jungkook besa su mejilla fugazmente.

Lo cierto es que quedan con las intenciones de que sea casi una cena y con suerte ir después de fiesta.

Jungkook quiere tomarle la mano cuando aparcan pero Yoongi esconde sus manos en los bolsillos como acto reflejo, y mira a todos lados observando que nadie los vigile.

—¿Por qué siempre estás tan atento a tu alrededor Yoon?¿Es por qué estas nervioso? Ya verás que te llevas muy bien con mis amigos...no te preocupes.

Jungkook pasa la mano por encima de su hombro y por fin entran al restaurante, viendo enseguida la mesa con parte de sus amigos.

Seokjin, Namjoon, Jimin y Yeeun estaban en la mesa y enseguida regresaron a ver a la pareja, Yoongi entonces tragó saliva y buscó se apegó a Jungkook quien no tardó en tomarle la mano y susurrar un 'estamos juntos en esto'.

—¡Hola chicos!—Dice Jimin.

La acogida de todos es calidad, incluso la de Namjoon que siempre tiende a ser más analítico.

—Tu cara me suena Yoongi-ssi.—Había sido el comentario de Namjoon cuando Jungkook se fue al baño.

—¿No te habrás metido en líos, no?—Dice Seokjin de forma jocosa.

—No lo molestes, Jungkook te regañará. Además, si se hubiera metido en problemas, Namjoon Oppa lo sabría, cien por cien. O podría averiguarlo...

—No lo molesten.—Regaña Jimin que está sentado al otro lado de Yoongi.

—¿Por qué dicen eso?—Pregunta en voz baja Yoongi a Jimin, y este le sonríe de forma amable.

—Namjoon Hyung es policía. Por cierto, Seokjin Hyung ¿no iba a venir tu amigo?

—Vendrá impaciente, pero a la fiesta.

—¿Fiesta?—Pregunta Yoongi.

—¿No te dijo tu novio que íbamos esta noche de fiesta?—Dice Seokjin.

—No, no se lo dije porque primero quería asegurarme de que no se iba a sentir incomodo con ustedes.—Interrumpe Jungkook tomando su lugar al lado de su novio. —¿Y tu acompañante Jimin Hyung? ¿Jay no viene?

—Se hizo tarde por recados que tenía que hacer, pero me ha dicho que ya esta llegando...hablando de Roma, ¡ahí está!¡Jay, aquí!

En el momento en el que Yoongi escucha el nombre se paraliza, y no mejora la situación cuando la mirada de ambos amigos se encuentra. El semblante de Hoseok se endurece enseguida y sus ojos lo miran de arriba abajo, para parpadear y clavarse en su mirada.

Se nota la tensión y Yoongi no se achanta, no lo mira desafiante pero si que lo analiza. Sabe que Hoseok esta molesto.

Cuando Jimin se acerca a abrazarlo su expresión cambia y parece metido en su papel. Hoseok saluda a todos, dejando al ultimo a Yoongi con quién hace ademán de querer estrechar las manos. Y el contrario solo lo hace porque Jungkook está a su lado.

[...]

Todos insisten en ir a 'Rey de Copas', un club que promete buen ambiente y en el que Hoseok consigue entradas VIP con facilidad.

Aún están por pasar, cuando Yoongi tomaba del brazo a Hoseok.

—Debo irme, vigila a Jungkook.

—¿Qué pasa? ¿No puedes quedarte?—Dice en el mismo tono bajo. —¿Tienes tan pocos huevos como para irte de su lado y dejarlo a su suerte? —Es tan obvio el doble sentido.

—Vamos Yoon, nos toca.—Jungkook se acerca y Yoongi le toma la mano.

Hoseok no puede creer lo que ve, jamás había visto así a su amigo. Y no sabe como sentirse al respecto, porque después de todo, está enfadado con él por dejarlos solos.

—He dado ordenes para que nadie informe a tu padre.—Dice Hoseok en su oído una vez entran al interior del local.—Pero debemos hablar...Yoongi.

El pálido asiente y Hoseok regrese a donde Jimin para abrazarlo por la espalda, y llegan a desaparecer de su campo visual pero a Yoongi no le cuesta darse cuenta que se lo ha llevado a una sala privada.

Y no se equivoca, Jimin y Hoseok están besándose, esta sentado de lado en el regazo de Hoseok que le esta haciendo caricias en la mejilla.

—Ya quería verte Jay...—Dice cuando se separa de sus labios y el más alto echa la cabeza para atrás embelesado por el tono y la forma de ser de Jimin que es demasiado tierno.

—Eres tan dulce, Algodón. —Deja un beso en su mejilla y luego otro en la línea de su mandíbula.—Que me dan ganas de comerte...

Los besos se asientan en la manzana de Adám y Jimin abre los labios y deja caer su cuello hacía atrás dándole espacio, llevando inconscientemente sus manos al cabello de Hoseok para que este no se retire.

Jadea suavemente al sentir la lengua del mayor y entonces sale de él una risilla encantadora que sofoca a Hoseok.

—¿Por qué te ríes, Algodón de azúcar?

—Tu mano esta haciéndome cosquillas.—Dice señalando la traviesa mano que esta en el interior de su camiseta, en sus costillas.

—¿Ah, sí? ¿Y aquí? ¿También te hace cosquillas?—Dice subiendo los dedos a una de sus dos protuberancias, tocando el pezón con las yemas de los dedos, como si estuviera sintonizando una radio antigua. Es gracioso para Jimin (al principio), pero cuando el contrario retira la mano, se humedece los dedos y regresa a su pezón, el sentimiento es distinto.

Se endurece bajo los dedos y Jimin se apega al oído de Jay.

—No sigas...no tengo mucha experiencia. Y no quiero tener relaciones en un sitio así...no para mi primera vez.

—¿Eres virgen?

—Del trasero...sí...