⌜Capítulo 18⌟

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•͟➳ Christopher



—¿En serio quieres que haga eso? — me preguntó Félix tras tomar asiento frente a mí.

—Por supuesto, ¿qué podría salir mal? — respondí tras encogerme de hombros.

—No creo que el día me alcance para decirte todo lo que podría salir mal— dijo con sarcasmo.

—Entonces, ¿no vas a ayudarme?

—Claro que sí— respondió —Somos amigos y los amigos siempre se ayudan.

—Me alegra escuchar eso— admití —Necesito que Minho obtenga cinco contratos firmados, así que, encárgate de los clientes busquen a Minho para llevar a cabo sus proyectos con él.

—¿Por qué...?

—No me lo preguntes— le interrumpí —Al menos, no por ahora.

—Entendido— murmuró.

No me parece justo el hecho de que el CEO le haya ordenado al pelinaranja a que obtuviera cinco contratos en tan poco tiempo. "¡Eso es imposible!", no pude evitar pensar con amargura. Sinceramente, quise hacer oídos sordos a lo que decía el hombre, pero me fue imposible no sentirme triste y molesto por la situación y todo empeoró cuando vi la mirada de Minho perder su brillo que le queda de maravilla.

—Obviamente, no tengo ni la menor idea de lo que estoy haciendo— admití —Pero tengo el presentimiento de que es lo correcto.

—Siempre te apoyaré y lo sabes muy bien— dijo Félix —¿Qué más deseas que haga por Minho?








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Después de haber estado hablando con Félix por al menos tres horas, decidí ir por un café tan pronto se marchó para ir en busca de empresarios interesados en firmar con Lee Minho. Se que estoy poniendo en juego mi posible nombramiento como gerente general, pero me parece muy injusto lo que le está haciendo el CEO a mi contrincante.

Entré a la pequeña cocina para hacerme un café y me detuve abruptamente al encontrarme con Minho. Ah, sinceramente, me gusta demasiado tener su mirada en mí, sus manos en mi cuerpo y sus labios sobre los míos. Y claro que también en otras partes del cuerpo me gusta tener su atención. He llegado a pensar que tengo una obsesión que lleva por nombre Minho y seguramente, me será muy difícil alejarlo de mí porque ya caí por completo, aunque no quiera aceptarlo en voz alta.

—¿Qué pasa? ¿Crees que te voy a morder? — me preguntó con tono burlón al percatarse de que he detenido mis pasos.

—¿Y que si dijera que no me parece mala idea? — contraataqué.

—No sabes lo que pides.

—Y tú no sabes lo que dices.

—Vete al infierno, Bang.

—Por favor— señalé la puerta —Lidera el camino que ya conoces a la perfección.

Minho bufó y después regresó toda su concentración a la elaboración de su café. Es tan meticuloso en todo lo que hace y debo admitir que me fascina el hecho de que cuando nos besamos o hacemos algo más, ni siquiera lo piensa, sino que, simplemente se deja llevar por el momento y eso lo hace más placentero. "Al menos, ambos estamos de acuerdo con ir más allá de insultos en la oficina", me fue inevitable pensar.

Me posé al lado de Minho para preparar mi café y sin quererlo, nuestros hombros se rozaron y sentí una corriente eléctrica recorrerme el cuerpo. "¿Cuándo dejará de sucederme eso?", me pregunté en silencio mientras fingía que todo estaba bajo control cuando la verdad es lo contrario.

—Mantén tu distancia— dijo Minho en voz baja, como si temiera ser escuchado por alguien más por lo que decidí burlarme un poquito de él, así que, me acerqué un poco más para preguntarle al oído—: ¿Qué fue lo que dijiste?

Tengo la certeza de que el pelinaranja rodó los ojos tan pronto escuchó mi pregunta puesto que siempre suele hacerlo cuando lo molesto. Y creía que me iba a empujar para alejarme de él, sin embargo, sucedió todo lo contrario a lo esperado pues fui tomado de la corbata y sin ejercer demasiada fuerza, Minho me acercó a él por completo hasta que las puntas de nuestras narices se tocaron.

—¿Por qué te gusta llevarme la contraria, Bang? — me preguntó Minho con voz baja e inevitablemente, cerré mis ojos mientras disfrutaba por completo de la cercanía que me hace sentir tan jodidamente bien.

—Quizá es porque me gusta verte molesto, Lee— admití sin siquiera pensarlo dos veces. Y cuando creía que iba a ser puesto en libertad, Minho unió nuestros labios para dar inicio a un apasionado beso que me dejó volando entre las nubes.

—No tienes ni la menor idea de lo que haré contigo cuando obtenga mi puesto como gerente general— dijo tan pronto me dejó en libertad.

—Lee Minho, estaré esperando con ansias ese día, así que, no me decepciones— le pedí antes de marcharme.

Por primera vez en todo este tiempo, no le he dicho que yo seré el ganador puesto que algo en mi interior, me dice que Minho obtendrá el puesto y deseo tanto apoyarle para que obtenga el éxito que tanto se merece.

"¿Qué es lo que estoy haciendo?", me pregunté en silencio mientras me dejaba caer en la silla tan pronto entré a mi oficina. No puedo creer que los sentimientos y emociones que tenía hacia Lee Minho, estén cambiando de una manera bastante radical que me cuesta trabajo diferir con facilidad porque todo esto es nuevo para mí.

¿Cuándo fue el momento en que me empezó a gustar ese chico que es bastante peculiar? Sinceramente, no recuerdo un momento exacto ya que siempre lo consideré como un chico más de la oficina y ahora, hasta estoy en busca de empresarios que firmen contrato con él para que obtenga lo que más desea.

𝙳𝚒𝚛𝚝𝚢 𝙱𝚘𝚢 🦋 𝚌𝚑𝚊𝚗𝚑𝚘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora