Mis mates (Twilight)

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—Lobita despierta.—dijo mi pelirroja mirandome con ternura, le sonrei pero rapidamente mire a la cama para verla vacía y pase de una sonrisa a una mueca de preocupación mirando a toda la habitación.—No te preocupes la bebe esta abajo con los demas.—me dijo con una sonrisa cerrada mirandome a lo ojos para acercase mas a mi para darme un tierno beso.

—Hola mi pelirroja.—dije modo en un susurro al separarnos.

—Vamos a bajo, tenemos que contarte algo.—me dijo agarrandome la mano para estirarme suavemente y guíarme a la cocina donde me esperaban con el desayuno.

—Buenos dias.—dije dandoles un beso a mis mates mientras a los demas que estaban les daba un pequeños abrazo.

—Sientate a desayunar querida.—dijo Esme mientras me miraba con una sonrisa maternal.

Me sente y comence a comer, pero un carraspeo me hizo parar y mirarlos.

—Tenemos que decirte algo.—dijo Alice con una sonrisa muy feliz.

—Nosotros nos vamos.—dijo Carlise pasando su brazo por la cintura de Esme para irse de la cocina juntos, ahora toda mi atención estaba en mis cinco compañeros, que me miraban con sus pequeñas sonrisas que me hacian sonreir tambien.

—¿Paso algo?—pregunte mirandolos con una sutil sonrisa mientras dejaba el tenedor en el plato.

—Estabamos pensando...—estaba diciendo Rosalie pero una energica voz la interrumpio.

—¡Bella esta viva!—dijo la castaña acercandose dado saltitos.

—¿Que?—pregunte sorprendida.

—Lo que quiere decir la duendecillo, es que tu hermana si se esta transformado.—dijo la pelirroja con una sonrisa, mire a mi hadita para verla con el ceño fruncido mirando a Victoria.

—¿Duendecillo?—pregunto Alice en un murmuro casi inaudible si no fuera por nuestro superoído nadie la hubiera escuchado, Jasper la abrazo por la cintura para acercarla a el y calmar de repente su mal humor contra la pelirroja.

—¿Bella se esta transformado?—pregunte con los ojos cristalizados, haciendo que todos me mirasen preocupados y sus seblantes de antes pasaran a segundo plano.

—Si peluchito ella esta bien.—dijo Emmett abrazandome dulcemente por detras.

—Que bien.—dije feliz con una sonrisa, y mis lagrimas caían por mis megillas.

—Señorita no llores.—dijo Jasper a mi lado, con un pañuelo secandome las lagrimas.

—Son lagrimas de felicidad, no de tristeza.—le respondí con una sonrisa cerrada.

—Igualmente no nos gusta verte llorar, amor.—dijo Alice ayudando al rubio con mis lagrimas.

—Aunque mi lobita es hermosa de todas las formas.—dijo guiñandome un ojo Victoria, mirandome atentamente con un toque de preocupación en los ojos igual que el resto de mis mates.

—Y hay otra cosa.—dijo Rosalie, acercadose con un vaso de agua para mi, la mire sin entender.—Dicen que si lloras pierdes H2O de tu cuerpo y te puedes deshidratar.—dijo entregandome el vaso, al escuchar eso solte una carcajada.

—Rubia, para eso hace falta que llore litros.—dije mirandola divertida, pero sin rechazar el agua.

—¿Rubia?, me gusta ese apodo.—dijo guiñandome un ojo, haciendome sonrojar sutilmente.

—Yo tambien quiero un apodo.—dijo con un puchero la pelirroja, haciendome sonreir.

—¿Bueno que otra cosa me teneis que contar?—pregunte esquivando de momento su puchero, haciendome escuchar un bufido de protesta.

—Emos estado pensando en ir una temporada a Alaska con el clan Denali, con Renesmee.—dijo Emmett dejandome mas espacio despues de abrazarme pero sin quitar sus manos de mi contacto.

—¿Con Renesmee?—pregunte sin entender su punto, estaba feli de poder ir a Alaska a ver mis otros mates pero el punto que no entendia porque tambien iria mi sobrina.

—Bella, se esta transformado puede durar entre una semana o dos y puede que tarde dos mas en controlar su sed...—dijo una voz conocida desde la entrada de la cocina, me gire un poco para ver a Edward con Renesmee en brazos.—A sin que seria mejor que te la llevaras ese tiempo y tambien por si acaso por los lobos no quieran hacer tonterias.—dijo lo último en un susurro haciendome rodar los ojos.

—¿Y cuando nos iriamos?—pregunte con curiosidad.

—Esta tarde.—dijo con emocion de nuevo en su voz la hadita, haciendome sonreir y asentir a mi cuñado.

—Perfecto, vamos hacer las maletas.—dijo por mi sorpresa Emmett mientras me agarraba modo saco de patata.

—Pensaba que esa frase la diria Alice.—dije con una voz divertida.

—Yo tambien.—solto esta desde la cocina, haciendome reir mientras subiamos por las escaleras y veía como Rosalie venia por detras con una sonrisa coqueta.

—¿Que estais planeando? Este no es el camino para hacer las maletas.—pregunte, ella me sonrio coquetamente mientras me guiñaba un ojo por otro lado escuche como Emmett ronroneaba a mi pregunta.—No hay tiempo para eso, hay que preparar una maleta.—dije sonrojada.

—Nosotras nos encargamos de ella.—dijo la voz de la pelirroja, mientras escuchaba que se iban de la casa, seguramente para ir a nuestra casa hacer las maletas para todos, al parecer ya que no tenia pinta de que ellos vayan hacer las suyas y yo tampoco.