Me refugio en ti

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-¿No me digas que sigues fumando como chimenea?

-No seas baboso y ven aquí- lo agarro justo por su cuello y hago un intento de estrangulamiento fallido. Es más fuerte que yo por mucho- ¿Cuándo volviste idiota?

-Acabo de aterrizar- me sonríe y noto al instante su nueva adquisición, se perforó el labio inferior- quería ver con mis propios ojos la que te has montado aquí. Es genial guapa, todo esto- señala hacia atrás donde se encuentra el estudio- Estoy muy orgulloso de ti.

Se acerca y me besa la cabeza y le hago una mueca de fingido asco y él ríe. Jake es el único amigo que conservo de años y aunque estaba en la otra punta del mundo desde hace mucho tiempo puedo notar que seguimos siendo los mismos.

-No puedo creer que estés aquí.

-Estaré haciendo negocios por aquí así que te hartarás pronto de mi cara.

-¿Has venido con Jenna la barbie?

-Que va!! Si hemos roto hace unos meses- eso, música para mis oídos - no finjas que te importa por favor.

- Sabes que no la soportaba Jacob, no voy a fingir que me importa cuando no es así. Solo espero que la hallas dejado tú y no al revés- Tuerzo los ojos.

- Quiero estar solo- me basta.

-Choca esos cinco, nos vamos de fiesta.

-¿Fiesta? ¿Cuándo? ¿Dónde? Cuenten conmigo.

Sonrío ante las palabras de Meredith acercándose y siendo entrometida como siempre, es innegable que desprende alegría, nadie diría que tanta oscuridad puede atacarla a veces.

-Aquí tienes mi tarjeta, me llamas y organizamos algo.

Nos despedimos rápidamente y Mer escanea a Jake con curiosidad y este hace lo mismo pero de una forma nada inocente. Hombres.

- ¿Ese quién es?

- Un amigo.

- Creía que no tenías.

- Pues ya ves.

- Bueno, venía a hablar justo de fiesta, necesitamos celebrar. Había pensado en comer en un restaurante y después irnos a una discoteca. ¿Qué crees?

- Me gusta- digo secamente, me cuesta mirar a Mer y no pensar en su versión masculina. Me irrita- Yo me encargo-Reservaré mesa para 7- tuerzo los ojos- si Alexander se apunta, porque obviamente ahora se cree tu gemelo y quiere traerse a su noviesita- escupo con odio- que espere fuera o que simplemente la siente en sus piernas.

-¿Pero de qué hablas?

- Estás advertida... y desinformada- añado largándome del lugar sin ganas de extender más una conversación sin sentido. Estoy de mal humor nuevamente.

***

Llevo mi copa de vino blanco a mis labios color rojo sangre y lo saboreo de la forma más tentadora que puedo.

Le sonrío a la persona a mi lado con amplitud y consigo lo que quiero.

Devolverle a Alexander la cara de idiota que puse al llamarle y me respondió su ligue diciendo que se estaba duchando.

Puedo ver su mandíbula tensarse y esto solo me insita a seguir, a hacerle enojar mientras pueda, porque yo, tengo el control.

-¿Y ustedes de que se conocen ?- pregunta All con duda- No lo recuerdo.

- Estaba en- soy interrumpida por la mano de mi compañero de cena sobre la mía, robándome el protagonismo como solo él sabe.

-En su primer año de universidad. Fuimos inseparables por todo ese tiempo- Me encanta que Jake levante las cejas insinuando cosas que aunque no pasaron sí que pudieron pasar porque siempre nos sacamos las chispas con las miradas. Amo totalmente que sea tan jodidamente observador y halla descifrado mi estrategia barata de hacer enfadar a Alexander con su presencia.