Leonor
El avión aterriza y el clima está un poco lluvioso. El señor Miller me presenta a Lucas, quien será mi chofer. Le estrecho la mano con una sonrisa fingida y me despido de Noé.
***
—¿El pent-house está lejos? —pregunto a Lucas, quien ya está conduciendo el vehículo.
—No, señorita, en unos veinte minutos llegaremos.
—Está bien —digo en voz alta.
Ehdas está inquieta dentro de su transportador, así que decido sacarla y cargarla en mis brazos. En ese momento, recibo una llamada en mi móvil y la contesto rápidamente al ver que es mi madre.
—Hola, mamá, ¿qué pasa?
—Leonor, ¿qué te ha pasado? ¿Estás bien? ¿Quieres regresar?
—Tranquila, mami, estoy bien. No sé qué te han dicho estas exageradas. —miro a Mandy y Jess, que también están absortas en sus móviles—. Solo fue un momento... tedioso, pero ya estoy bien.
—Segura, Leo. Recuerda que está bien no estar bien —dice mi madre con comprensión en su voz.
—Sí, mamá, estoy bien. Es solo que recordé lo de Brett, y juré que ya lo había superado y que sería capaz de volver a subirme a un avión después de tanto tiempo.
La conversación con mi madre continúa durante casi todo el trayecto, y ella intenta consolarme, lo que hace que las ganas de llorar aumenten. Cierro la llamada y Jess me habla.
—Leo, ¿me puedo tomar una foto con tu perro?
—Más respeto hacia Ehdas, Jess, y querida, ¿qué crees que pensará Jackson de tu actitud con Noé? —respondo.
—Yo no hice nada malo, solo conocí al chico al que le darás tutoría. Además, sabes que no me gustan los menores, es muy joven para mi gusto.
Le paso a Ehdas a Jess, pero no sin antes advertirle que la cuide bien. Jess comienza a tomarse fotos no solo con mi hermosa perrita, sino también conmigo y Mandy.
—Oye, ¿y por qué no hacemos una fiesta en la piscina mañana? —dice Jess mirándome principalmente a mí. «No es tan mala idea».
—No es una mala idea, Lizzy, pero mira cómo está el clima.
—De aquí a mañana se arregla, tranquila. —Sonriente me devuelve a Ehdas—. Leo, voy a invitar a mi amigo Brandon.
—Invita a quien quieras, eso va para ti también, Lis.
—Ya llegamos, señoritas. —Nos interrumpe el chofer.
Jess es la primera que baja emocionada. Le coloco uno de sus collares a Ehdas para que pueda caminar un poco. Ayudamos a Lucas con nuestro equipaje.
—Gracias, Lucas. —Digo con una sonrisa en el rostro.
—No hay de qué, señorita. Este es mi número por si necesitan mi ayuda.
—Okey, gracias.
Cierro la puerta y suelto a Ehdas para que pueda conocer la casa en la que ella, Jess, Mandy y yo estaremos viviendo por dos meses. El pent-house es bonito, tiene colores claros y cálidos. Ya las gemelas empezaron a pelearse por una habitación.
—Para que no se peleen, yo me sacrificaré. —Digo poniendo mis manos en mi pecho, bajando la cabeza y negando con la misma. Nos reímos y Mandy sigue el juego.
—No, Leonor, no tienes por qué. Yo con gusto lo haré.
Después de estar jugando con Jess y Mandy, decido lavarles las patitas a Ehdas para poder dormirnos un rato.
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Nota de la autora: se les quiere.
Gracias: @Ilianneyx_
Sorry por el cap corto es que el cargador de mi laptap se daño y no he podido comprar otro.
Bye.
Sorry por la demora.
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Que esto sea un "secreto"
RomantiekElla acepta hacerle un favor a un completo desconocido sin saber que ese extraño resultó ser el hijo de la compañía enemiga de su padre. ¿Cómo se enteró? fácil, descubre que su padre hizo un trato con la compañía enemiga. ¿De qué trata este trato? D...