Solo era una maldición. Un destino ya dictado y cinco cristales que nos mantienen vivos, aunque no por mucho tiempo.
Somos prisioneros de las costumbres familiares, y si tenemos en cuenta nuestra posición, debíamos dar el ejemplo. No desobedecer las...
Había llegado el día del partido contra la Royal Academy, y gracias a Mark pudimos conseguir a tiempo un nuevo entrenador. Aunque nunca pensé que el dueño de un restaurante seria el que nos representara.
Mark: Hoy es la final de la fase previa y volveremos a jugar con la Royal Academy, y verán el resultado de nuestros entrenamientos especiales.
Todos: ¡Si!
El equipo está entusiasmado porque es la final.
Mark: ¡Va a hablar el jefe del restaurante! Digo, el entrenador Seymour Hillman.
Entrenador Seymour: Si, solo tengo una cosa que deciros. Luchad con todas vuestras fuerzas para que luego no tengáis nada que lamentar.
Me muevo un poco inquieta en mi asiento después de las palabras del entrenador.
Gabi: ¿Estás bien mami?
Pregunta Gabi estando sentado en mis piernas. Me mira con preocupación.
Naomi: Si. —Respondí con una sonrisa.
Siendo sincera, lo único que me preocupa es ese dichoso Ray Dark. ¿Qué trampa nos habrá preparado? Tendremos que estar alerta.
~•~•~•~•~•~•~•~•~•~• En la Royal Academy.
<<Celia está muy extraña desde que llegamos. ¿Le ocurrirá algo?>>.
Mientras que nos dirigíamos a los vestuarios del equipo, tomé a Gabi en mis brazos y me acerqué a Celia.
Naomi: ¿Pasa algo Celia? —esta me mira—. Estás muy rara.
Celia: Es que verás Naomi, mi hermano estudia aquí.
Naomi: ¿Tu hermano? —asiente—. ¿Quién es?
Veo como duda un poco antes de responder.
Celia: El capitán de la Royal Academy, Jude Sharp.
Naomi: Que mal, ahora me sentiré mal al patearle la cara.
Celia: ¿Eh? —se sorprende.
Naomi: —me rio—. Es broma. Pero no entiendo, si son hermanos, ¿entonces por qué sus apellidos son diferentes?
Celia me empieza a contar que cuando ellos eran pequeños, sus padres murieron por lo que los dieron en adopción, y sus caminos se separaron.
Naomi: Lo siento mucho por ustedes.
<<Aunque a mi me pasó algo parecido>>.
Pensé agarrando con fuerza el collar que tenía puesto. La forma de este era un corazón incompleto, pues tenía en el centro un hueco con la figura de una pieza de rompecabezas. Pues originalmente mi collar es uno compartido. Yo tengo esta parte, y la otra mi hermano pequeño.
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